Represalias

Alemania y Francia expulsan a decenas de diplomáticos rusos tras la matanza de Bucha

El Gobierno de Scholz ha hecho extensiva la medida a 40 representantes, mientras que la decisión del Ejecutivo galo afecta a 30 personas

Alemania declaró este lunes por la noche “personas non grata” a 40 diplomáticos rusos de la embajada de Berlín y les ha dado cinco días para abandonar el país. En una comparecencia, la ministra germana de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock, aseguró que se trata de personas que “han trabajado todos los días en contra de nuestra libertad y contra la cohesión de nuestra sociedad aquí”.

La decisión, que tiene lugar después de conocerse las atrocidades supuestamente cometidas por tropas rusas en la ciudad de Bucha, fue comunicada poco antes al embajador ruso Sergei Nechayev. “No vamos a tolerar esto por más tiempo”, añadió la jefa de la diplomacia alemana, que asimismo anunció “otras reacciones”, que serán consensuadas con sus socios, en alusión al endurecimiento de las sanciones que previsiblemente adoptará la Unión Europea.

Asimismo, la ministra del Interior, Nancy Faeser, dijo que todos los afectados trabajan para los servicios secretos de su país. La medida es “otro paso constante contra el liderazgo ruso, que está librando una guerra terriblemente brutal contra la población civil ucraniana”. El objetivo es proteger a Alemania contra el espionaje ruso, los intentos de ejercer influencia, las mentiras y la propaganda de guerra.

“No permitiremos que esta guerra criminal de agresión se lleve a cabo como una guerra de información en nuestro país”, añadió Faeser. Poco después, la embajada rusa en Berlín escribió en el servicio de mensajería Telegram: “La reducción injustificada del personal diplomático de las representaciones rusas en Alemania reducirá el espacio para mantener el diálogo entre nuestros países, lo que conducirá a un mayor deterioro de las relaciones germano-rusas”.

Francia secunda a Alemania

París siguió hoy los pasos de de Alemania y el gobierno de Macron anunció también la expulsión del país de 35 diplomáticos rusos al considerar que su actividad es contraria a los “intereses de seguridad” nacionales.

“Francia ha decidido expulsar a numerosos trabajadores rusos con estatuto diplomático destinados en Francia y cuyas actividades son contrarias a nuestros intereses de seguridad”, apunta una nota del Ministerio de Exteriores.

Su comunicado, de apenas tres frases, señala que este paso “se inscribe en una iniciativa europea” y recalca que su primera responsabilidad es “garantizar la seguridad de los franceses y de los europeos”.