Defensa

Johnson promete defender a Suecia y Finlandia en caso de ataque ruso

Londres firma con Estocolmo y Helsinki acuerdos de seguridad mutua mientras ambos países nórdicos deciden su adhesión a la OTAN

La primera ministra sueca, Magdalena Andersson, y Boris Johnson firman en Harpsund el acuerdo de defensa mutua
La primera ministra sueca, Magdalena Andersson, y Boris Johnson firman en Harpsund el acuerdo de defensa mutuaChristine OlssonAgencia EFE

A pocos días de que anuncie oficialmente su probable adhesión a la OTAN, Suecia ha recibido hoy garantías británicas por escrito de apoyo militar en caso de ser atacada por Rusia antes de que culmine su integración en la Alianza Atlántica. Así se lo ha hecho saber esta mañana el “premier” Boris Johnson a su homóloga sueca, Magdalena Andersson, en su residencia de verano de Harpsund, a 100 kilómetros al oeste de Estocolmo.

Según el texto de la llamada “Declaración Política de Solidaridad”, cada país se compromete a acudir en ayuda del otro en caso de ataque. “Si alguno de los países sufre un desastre o un ataque, Reino Unido y Suecia, a petición del país afectado, se ayudarán mutuamente de diversas maneras, que pueden incluir medios militares”, asegura el texto firmado por ambos mandatarios.

El acuerdo, no obstante, respeta la soberanía de Suecia y Reino Unido para tomar sus propias decisiones. “Tal cooperación intensificada permanecerá totalmente en línea con la política de seguridad y defensa de cada país y está diseñada para complementar, no reemplazar, la cooperación europea y euroatlántica existente”, se puede leer.

“El primer ministro y yo hemos acordado… si alguno de los países sufre un desastre o un ataque, Reino Unido y Suecia se ayudarán mutuamente de diversas maneras”, explicó en la rueda de prensa conjunta Andersson. “El apoyo se dará a pedido del país afectado, y puede incluir recursos militares”, añadió la primera ministra sueca.

A su lado, Johnson confirmaba que “lo que estamos diciendo, enfáticamente, es que en caso de un desastre o un ataque a Suecia, Reino Unido acudiría en ayuda de Suecia con lo que Suecia solicite”, dijo Johnson.

Al margen del acuerdo bilateral de seguridad, Londres se compromete a proporcionar “recursos militares” en caso de Suecia sea el blanco de un ataque, independientemente de que el país nórdico ingrese en la OTAN. Según un comunicado de prensa del gobierno del Reino Unido, Londres ofrecerá enviar barcos, tropas y aviones de combate a la región nórdica, más vulnerable tras la invasión rusa de Ucrania el pasado 24 de febrero.

“Como parte de una mayor cooperación de defensa con Suecia y Finlandia, el primer ministro ofrecerá aumentar los despliegues en la región, incluidos los activos y el personal de la Royal Air Force, el ejército británico y la Royal Navy”, explica el comunicado de Downing Street.

En pleno diálogo nacional en Suecia y Finlandia sobre su integración en la OTAN tras décadas de no alineamiento militar, Johnson enfatizó el hecho de que la guerra de Putin ha obligado a los países europeos ha reforzar su seguridad nacional. “La guerra en Ucrania nos está obligando a todos a tomar decisiones difíciles, pero las naciones soberanas deben tener la libertad de tomar esas decisiones sin miedo ni influencia, ni amenazas de represalias”, explicó el líder “tory”.

Rusia ha amenazado repetidamente con “consecuencias político-militares” a Suecia y Finlandia si deciden llamar a las puertas de la OTAN, lo que ha creado considerable inquietud en los dos países nórdicos sobre posibles agresiones del Kremlin mientras se hallen en esa “zona gris” que supone el período entre que solicitan su adhesión a la organización militar y el momento en que son socios de pleno derecho y, por tanto, están protegidos bajo la defensa colectiva plasmada en el artículo 5 del Tratado de Washington.

Johnson recordó que el acuerdo de seguridad ente Londres y Estocolmo también contempla reforzar la cooperación en inteligencia y ciberseguridad, así como maniobras militares conjuntas. “Este es un acuerdo sobre el que, juntos, tenemos la intención de construir, ya sea compartiendo inteligencia o trabajando juntos para combatir los ataques cibernéticos, ya sea trabajando juntos en adquisiciones de defensa, ya sea haciendo ejercicios conjuntos juntos, Suecia y el Reino Unido tienen la intención de hacer mucho más. juntos”, enumeró.

Malena Britz, investigadora de la Universidad de Defensa de Suecia, compara el acuerdo anglo-sueco con la defensa colectiva plasmada en el artículo 42.7 del Tratado de Lisboa. “Se podría decir que estamos recuperando el apoyo que teníamos de los británicos antes de que abandonaran la UE” tras del Brexit, declaró la televisión pública SVT. Johnson y Andersson “discutieron el apoyo con todos los recursos posibles, incluso militarmente, y eso es exactamente lo que cubre la legislación actual de la UE”, explicó.

Escala en Helsinki

Tras su visita a Estocolmo, Johnson voló a Helsinki para reunirse con el presidente finlandés, Sauli Niinisto, con quien rubricó el mismo acuerdo de defensa mutua que con su vecino sueco. “Asumimos estos compromisos con nuestros amigos en Finlandia no solo porque podemos, sino porque debemos”, aseguró el “premier” británico.

En palabras de presidente finlandés, “Firmamos una declaración conjunta. Nos mantendremos unidos y nos apoyaremos mutuamente en cualquier circunstancia, con buen o mal tiempo”.

Sobre el rechazo ruso al ingreso de Finlandia y Suecia a la OTAN, Niinistö replicó que “si el caso es que nos unimos bien, mi respuesta [a Rusia] sería que tú provocaste esto, mírate en el espejo”.

Este jueves a las 10 de la mañana (una hora menos en la España peninsular), el presidente finlandés y la primera ministra, la socialdemócrata Sanna Marin, tienen previsto anunciar en una declaración oficial su posición sobre la adhesión del país a la Alianza Atlántica. A continuación, los partidos con representación parlamentaria trasladarán a la opinión pública sus posturas. Los socialdemócrata de Marin, el SDP, se reúnen el sábado en un congreso extraordinario para pronunciarse sobre la OTAN tras décadas de oposición.