Caos en Italia tras la dimisión fallida de Mario Draghi

Italia vuelve a la inestabilidad política después de que el Movimiento Cinco Estrellas rechazara votar en el Senado el último decreto del Gobierno del que forma parte. La abstención de los ‘grillinos’ no impidió dar luz verde al texto, que contiene ayudas por valor de 26.000 millones de euros para familias y empresas, pero lanzó una fuerte señal política de desacuerdo, que empujó al primer ministro Mario Draghi a presentar su dimisión.

“La votación de hoy en el Parlamento es un hecho muy significativo desde el punto de vista político.La mayoría de unidad nacional que ha sostenido este Gobierno desde su creación ya no existe y ha terminado el pacto de confianza que basaba la acción del Gobierno”, dijo Draghi a sus ministros, reunidos ayer en Roma.

Draghi se reunió con el presidente de la República, Sergio Mattarella, antes y después del Consejo de Ministros para comunicarle su decisión, pero el jefe del Estado no aceptó la renuncia del primer ministro y le invitó a presentarse la próxima semana ante el Parlamento para verificar los apoyos con los que cuenta.

La dimisión de Draghi, que encabeza un gobierno de unidad nacional desde febrero de 2021 formado por la mayoría de las fuerzas políticas, excepto Hermanos de Italia, llegó después de semanas de desencuentros con el principal partido de la coalición, el Movimiento Cinco Estrellas.

El líder de los ‘grillinos’, el ex primer ministro Giuseppe Conte, había amenazado con abandonar el Ejecutivo en protesta por la inclusión en el decreto en discusión de un polémico proyecto que prevé la construcción de un incinerador de basura en Roma. El texto fue presentado ayer en la Cámara Alta, que debía convertir el decreto en ley, en forma de moción de confianza, una estrategia muy habitual en Italia para medir los apoyos con los que cuenta un gobierno y evitar el temido voto secreto, así como acelerar la tramitación parlamentaria evitando la presentación de enmiendas. Y el Cinco Estrellas cumplió su amenaza. “El M5E ha dado su apoyo a este gobierno desde el principio” pero “si se fuerza para que normas contra la transición ecológica entren en un decreto que nada tiene que ver con ello, nosotros no lo votaremos”, justificó Conte.

Durante la votación la semana pasada en la Cámara de los Diputados, el M5E votó la confianza en el gobierno, pero se abstuvo de votar el mismo decreto. En el Senado las reglas son diferentes y por ello debían votar tanto la confianza como el texto. Aunque los ‘grillinos’ no abandonaron oficialmente la coalición ayer, la abstención fue interpretada como un desafío al que el ex presidente de la Banca Central Europea reaccionó subiendo la apuesta y presentando su dimisión.

“En estos días por mi parte ha habido el máximo compromiso para seguir un camino común, incluso tratando de entender las exigencias que las fuerzas políticas me han avanzado. Como evidencia el debate y la votación hoy en el Parlamento, ese esfuerzo ha sido insuficiente”, lamentó Draghi ante sus ministros. Sin embargo, la partida no está cerrada. El primer ministro se presentará la próxima semana en el Parlamento y corresponderá a los partidos renovar su confianza en el economista o poner fin a su experiencia de gobierno. El Ejecutivo cuenta aún con los números para seguir adelante, incluso sin los ‘grillinos’, pero el economista ha asegurado que no encabezará ningún gobierno en el que no participe el M5E.

“El Gobierno debe seguir adelante por el bien del país”, aseguró el líder del PD, Enrico Letta, mientras que la Liga de Matteo Salvini dejó la puerta abierta a un adelanto electoral: “Nadie debe tener miedo de devolver la palabra a los italianos”. El futuro del actual Ejecutivo vuelve a estar en manos del M5E, que podrían apoyar a Draghi la próxima semana en Parlamento, a pesar de llevar meses echando un pulso al primer ministro.

La semana pasada Draghi y Conte se reunieron para firmar una tregua. El líder del M5E confirmó su apoyo a la coalición, pero a cambio exigió al primer ministro “nueve medidas extraordinarias” para paliar los efectos de la crisis. En medio de la batalla política está el rechazo del M5E a la política económica de Draghi y el envío de ayuda militar a Ucrania, pero también una calculada estrategia electoral después de sus últimos batacazos en las urnas y del terremoto desencadenado dentro del partido tras la escisión provocada por el ministro de Exteriores y ex líder de la formación, Luigi Di Maio.