Explosiones

Spetsnaz, el grupo de élite ruso que puede estar detrás del sabotaje al gasoducto Nord Stream

La despiadada unidad ya intentó acabar con la vida de Zelensky al inicio de la guerra

Una extraña mancha apareció junto al gasoducto Nord Stream, en el mar Báltico, algo altamente improbable si no es provocado según los expertos. La tubería está fuertemente protegida, recubierta con 25 toneladas de hormigón reforzado con acero y con un peso de 11 toneladas cada una.

Además, los sismógrafos de la zona recogieron alteraciones en la zona compatibles con explosiones. Los ingenieros alemanes del gasoducto notaron que hubo una caída de presión “explosiva” en la tubería. Con el paso de las horas, era cada vez más evidente que había sido un sabotaje.

Una mancha frente a la isla danesa de Bornholm
Una mancha frente a la isla danesa de BornholmlarazonAgencia AP

Dinamarca detectó enormes burbujas en la superficie del mar cerca de la isla de Bornholm y Suecia confirmó finalmente que hubo dos explosiones submarinas cerca de las zonas en las que se produjo la fuga.

¿Quién es el responsable del sabotaje del gasoducto Nord Stream? Todas las miradas apuntan a Vladimir Putin. Un castigo a occidente ahora que comienza a llegar el frío y el gas es más necesario que nunca. por no hablar del tejido industrial. donde muchas empresas se han obligado a cerrar. Entre ellas, una de las fabricas de papel higiénico más importantes de Alemania.

¿Cómo pudo producirse el sabotaje? Rusia tiene la flota de submarinos espía mas grande del mundo, con base en el Ártico, y podría haber movilizado a algunas unidades sin ser detectados y los buzos de la unidad de sabotaje de operaciones especiales de Putin podrían haber volado el gasoducto Nord Stream justo debajo de las narices de la OTAN.

La operación podría haberse realizado de dos formas, o a través de los buzos de la despiadada unidad rusa Spetsnaz, con base en el Báltico, o mediante drones. Los Spetsnaz son una unidad de élite formada por 15.000 soldados que trataron de acabar con la vida del presidente ucraniano Volodimir Zelensky y que se someten a un entrenamiento agotador, iniciaciones potencialmente mortales y maniobras con balas reales.

El brutal entrenamiento de los Spetsnaz (“propósito especial”) les obliga a someterse a duras competiciones de lucha callejera, en las que vale usar cualquier cosa. Otra de las pruebas que deben superar es la de encerrarse con un perro rabioso en una habitación, armados con una pala. Para salir, no les queda más remedio que matar al animal.

Los soldados también las tropas deben mostrar sus habilidades usando un lanzagranadas antitanque RPG-7, AK74, rifles de francotirador y pistolas. Incluso deben realizar una carrera de 8 kilómetros en un terreno accidentado y que es bombardeado con granadas de humo y con munición real.

Los aspirantes a entrar en la unidad especial deben superar tres etapas, en las que son llevados al límite. La primera prueba es física, la segunda con armas y municiones y la tercera, la más dura, en la que tienen que realizar sesiones de combate con otros soldados durante 12 minutos y donde se golpean sin restricciones de ningún tipo.

Los Spetsnaz fueron clave durante la Guerra Fría, pero la organización no cayó con el estado soviético y Putin los ha recuperado para sus intereses.

Buzos profesionales, drones o barcos comerciales disfrazados

El experto en guerra submarina HI Sutton explicó al diario británico “The Sun” que Putin podría haber movilizado a la oscura unidad naval GUGI para llevar a cabo un ataque. “El canal de suministro submarino estaba en 230 pies (70 metros) de agua ‘buceable’ a la que los buzos profesionales podían llegar fácilmente y colocar bombas”. Pero también apunta a la posibilidad de que hayan intervenido los buzos de la unidad Spetnaz o directamente la unidad de drones submarinos de última generación rusos, capaces de realizar ataques en aguas profundas. Sólo necesitarían un “barco anfitrión de algún tipo” para transportarlos.

Anders Puck Nielsen, investigador del Royal Danish Defense College, dijo que lo más sencillo es que hayan sido los hombres rana rusos: “Técnicamente hablando, esto no es difícil. Solo requiere un bote y algunos buzos que sepan cómo manejar artefactos explosivos”.

Otra causa probable apuntada por el diario “The Guardian” es que las minas fueran colocadas directamente en un barco comercial disfrazado y haberlas detonado días o semanas después de ser colocadas.

Ucrania acusó a Rusia de llevar a cabo un “ataque terrorista”, el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, dijo que fue un “acto de sabotaje”, mientras que sus homólogos danés y sueco también están de acuerdo en que se trata de “acciones deliberadas”. Por si fuera poco, los servicios de inteligencia suecos recibieron una información que confirmaba la intencionalidad del sabotaje. De hecho, la CIA norteamericana ya advirtió la a Alemania la posibilidad de un sabotaje de este tipo hace semanas.

La reparación “sine die”

El operador del gasoducto no ha podido hacer una estimación del tiempo que tardará en reparar la instalación. Los flujos a través del oleoducto ya se redujeron al 20 por ciento de su capacidad en el mes de julio y se detuvieron a finales de agosto porque la compañía estatal de petróleo y gas de Rusia, Gazprom, dijo que necesitaba mantenimiento, pero no reabrió la línea.

Por ello, el sabotaje no tendrá un efecto inmediato, pero sí ha logrado que los precios se vuelvan a disparar. En este caso un 12 por ciento.

Los gasoductos Nord Stream 1 y Nord Stream 2 pueden llegar a transportar 110.000 millones de metros cúbicos de gas al año desde Rusia a Europa occidental.

Zona de exclusión

Para mantener la instalación a salvo y prevenir una posible explosión mayor, se ha establecido una zona de exclusión para varcos y aviones de cinco millas náuticas y 1.000 metros de altitud alrededor de la zona de las fugas.

El buque de guerra danés HDMS Absalon, una fragata de 6.300 toneladas armada con misiles será el encargado de vigilar la zona y evitar nuevas intrusiones.