Francia

¿Quién es Jordan Bardella, el nuevo líder de la ultraderecha francesa?

Hijo de inmigrantes italianos y criado en un barrio de la periferia de Paris, ha tenido una fulgurante carrera política como estrecho colaborador de Marine Le Pen

Jordan Bardella, tras ser elegido el sábado nuevo líder de Raegrupación Nacional
Jordan Bardella, tras ser elegido el sábado nuevo líder de Raegrupación NacionalTERESA SUAREZAgencia EFE

Jordan Bardella, joven político de 27 años, se encamina a confirmarse este fin de semana como la estrella en ascenso de la extrema derecha en Francia y heredero favorito de la veterana líder Marine Le Pen.

Bardella, nacido en Drancy, en la región de París, fue elegido este sábado nuevo presidente del partido antiinmigración Reagrupación Nacional (RN) con el apoyo del 85% de los delegados del partido.

Tras 11 años al mando, Marine Le Pen decidió retirarse de la presidencia del partido, conocido anteriormente como Frente Nacional (FN) y que su padre, Jean-Marie Le Pen, dirigió durante casi 40 años previamente.

“El hecho de que el presidente del partido no lleve el apellido Le Pen es una señal de la apertura y confianza que tiene Marine en la nueva generación”, aseguró Bardella a la AFP durante un reciente viaje al este de Francia.

El ultraleal protegido, que fue elegido diputado en el Parlamento Europeo en 2019, no busca eclipsarla. “Soy un candidato de continuidad, con el objetivo de construir sobre [su] increíble legado”, agregó.

Bardella desearía que Le Pen se presentara por cuarta vez a la presidencia de Francia en 2027, tras lograr su récord de 41,45% de votos en la segunda vuelta de las elecciones en abril de este año frente al centrista Emmanuel Macron.

La hasta ahora presidenta del RN encabezó la campaña electoral de las legislativas en junio, y obtuvo 89 escaños, 10 veces más que cinco años antes, convirtiendo en el primer partido de la oposición en la Asamblea Nacional (cámara baja).

Jordan Bardella es el presidente interino desde septiembre de 2021, cuando Le Pen dio un paso al costado, supuestamente temporal. “Ha hecho todo bien y todos lo respetan”, dijo a la AFP el diputado ultraderechista Laurent Jacobelli.

“Y sabe cómo hacer que diferentes personas trabajen juntas. Entonces, ¿por qué cambiar?”, agregó Jacobelli durante un acto político a mediados de octubre en Hayange, en el noroeste de Francia.

En el evento, Bardella habló con confianza, sin notas, durante 40 minutos, compartiendo detalles sobre su infancia en la octava planta de un edificio de los suburbios del noreste de París, donde vivía con su madre, inmigrante italiana.

“Todos los días desde mi ventana y cuando entraba en el edificio veía que había traficantes de droga controlando si eras de la Policía”, contó Bardella, subrayando que también veía a niñas con velo.

El acoso personal y los disturbios de 2005 en los suburbios franceses lo empujaron a unirse al partido de Le Pen con sólo 16 años, para evitar que “Francia se pareciera a lo que [él] había vivido”.

La normalización del partido

A Bardella le gusta enfatizar que pertenece a una nueva generación de nacionalistas con poco en común con la imagen racista y antisemita asociada con Jean-Marie Le Pen y el FN.

Marine ha tratado de distanciarse todo lo posible de este legado tóxico, aunque los críticos dicen que el racismo sigue abundando y acusan a la líder de hablar de viejas ideas con un nuevo lenguaje.

Bardella es la imagen del partido moderno, pulcro y controlado que ahora promueve. Siempre va vestido con camisas inmaculadas, zapatos lustrados y pelo corto.

Sus opositores internos, como Aliot, expresaron su malestar con una supuesta disposición a adoptar las ideas propugnada por su rival ultraderechista Zemmour.

El año pasado, Bardella estuvo cerca de secundar el mantra de Zemmour del “Gran Reemplazo”, una teoría de la conspiración que sugiere que los europeos blancos están siendo reemplazados deliberadamente por inmigrantes.

También hay dudas sobre qué valor tiene la presidencia de RN, dado que Marine Le Pen lidera formalmente su cohorte en el Parlamento y se espera que sea su candidata a la presidencia de Francia en 2027.

Algunos, no obstante, lo ven como un futuro trampolín. “No sé si se nos permite decirlo y no quiero halagarlo, pero creo sinceramente que Jordan será presidente algún día”, aseguró el parlamentario Jacobelli.