Lavado de dinero

EE UU pide extraditar a un británico residente en Mallorca por colaborar con un oligarca ruso

Washington acusa Richard Masters de incumplir las sanciones impuestas a Moscú. El arrestado cambió el nombre de la embarcación de ‘Tango’ a ‘Fanta’

Agentes de la Guardia Civil y del FBI durante el registro en el interior del yate ruso 'Tango'.
Agentes de la Guardia Civil y del FBI durante el registro en el interior del yate ruso 'Tango'.GUARDIA CIVILGUARDIA CIVIL

La Guardia Civil arrestó a petición de la Justicia de los Estados Unidos a Richard Masters, un ciudadano británico residente en Mallorca, por presuntamente participar en una operación de lavado de dinero ruso junto al ciudadano Vladislav Osipov a través del yate de lujo Tango, valorado en 90 millones de euros.

Masters reside en la localidad mallorquina de Santa María y es fundador y director de la empresa de yates de lujo Master Yachts Consultancy, con sede en el paseo marítimo de Palma.

Su detención tuvo lugar el pasado viernes, el mismo día que el Departamento de Justicia estadounidense informó de la imputación de estos dos ciudadanos por supuestamente haber participado en un sistema de evasión de sanciones y lavado de dinero de este yate perteneciente al oligarca ruso Viktor Vekselberg.

El pasado mes de abril, la Guardia Civil incautó en el puerto de Palma el yate Tango de este multimillonario reclamado por Estados Unidos y que es próximo al presidente ruso, Vladimir Putin. Esta operación se realizó de forma conjunta con las agencias de Estados Unidos FBI y Homeland Security Investigations (HSI).

El yate incautado, de 78 metros de eslora, tiene bandera de las Islas Cook y está registrado a nombre de una sociedad radicada en las Islas Vírgenes Británicas, que a su vez está administrada por sociedades de Panamá.

Richard Masters, de 52 años, y Vladislav Osipov, ruso de 51 años, empleado de Vekselberg, fueron acusados en un tribunal de la capital estadounidense.

Según el escrito de acusación, afrontan cargos de conspiración para defraudar a Estados Unidos y de cometer delitos contra el país por violar la Ley de poderes económicos de emergencia internacional y también de lavado de dinero, al seguir explotando económicamente el yate, propiedad del sancionado oligarca ruso Viktor Vekselberg.

La detención de Masters en España se debe a una solicitud de arresto de Estados Unidos con fines de extradición, mientras que está pendiente una orden similar contra Osipov, cuyo paradero no ha sido precisado por el Departamento de Justicia.

“Los facilitadores de la evasión de sanciones permiten que los oligarcas que apoyan al régimen de Vladímir Putin se burlen de la ley estadounidense. Estados Unidos no permitirá que sus instituciones financieras sean manipuladas o defraudadas con el fin de beneficiar a quienes apoyan una guerra ilegal”, dijo el fiscal federal para el Distrito de Columbia, Matthew Graves.

Según la acusación, a pesar de las sanciones de EE UU emitidas contra Vekselberg en abril de 2018, Osipov y Masters facilitaron que el yate siguiera operando mediante el uso de empresas estadounidenses y el sistema financiero de EE.UU., intentando ocultar que la embarcación era propiedad del oligarca ruso.

Masters dirige una empresa de gestión de yates en Palma. Una vez que Vekselberg fue sancionado en abril de 2018, la compañía del ciudadano británico se hizo cargo de la gestión del yate y conspiró con otras personas para evadir las sanciones de EE.UU.

Osipov, un empleado de Vekselberg, diseñó una estructura de propiedad complicada de empresas ficticias para ocultar la propiedad real del yate por parte de Vekselberg. Los esfuerzos de ambos permitieron que el barco siguiera operando como un yate de lujo con toda la gama de servicios y artículos disponibles, “respaldado por cientos de miles de dólares en servicios estadounidenses obtenidos ilegalmente y transacciones financieras estadounidenses, y todo para el beneficio de Vekselberg”, denuncia el comunicado emitido por la fiscalía estadounidense.