Italia

Histeria colectiva a las afueras de Roma: un pueblo se paraliza tras los avistamientos de un cocodrilo en el río

Las autoridades movilizan un operativo especial tras múltiples reportes de un reptil en el río Sanguinara, aunque aún no hay confirmación oficial

Imagen del supuesto reptil
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El tranquilo pueblo costero de Ladispoli, a 40 km de Roma, vive desde el sábado una insólita psicosis colectiva tras varios avistamientos reportados de un cocodrilo o caimán en las aguas del río Sanguinara. Las llamadas de pánico al número de emergencias desataron un operativo que involucra a policía, carabineros y protección civil, aunque hasta el momento no se ha capturado ningún reptil ni se han obtenido pruebas concluyentes.

Operativo de búsqueda

Testigos aseguran haber visto y fotografiado un pequeño caimán de entre 50 y 70 centímetros cerca del puente Navarra. "Las imágenes son borrosas pero muestran algo que podría coincidir con las características de un reptil", admitió un portavoz de las autoridades locales. Mientras los equipos especializados rastrean la zona fluvial con drones y equipos térmicos, decenas de curiosos se agolpan en los márgenes del río, entre la incredulidad y el temor de presenciar una escena propia de un documental.

El alcalde Alessandro Grando activó protocolos de alerta aunque mostró cautela: "No descartamos que sea una broma de mal gusto". En un comunicado oficial, confirmó que analizan fotografías y testimonios, pero recordó que en 2023 ya hubo un caso similar cuando un león escapó de una instalación local, lo que generó escepticismo entre algunos vecinos.

Este no es el primer incidente con animales exóticos en la zona. En noviembre de 2023, un león escapó de una propiedad privada en circunstancias nunca aclaradas, generando entonces otro operativo de emergencia. Los expertos señalan que, de confirmarse el avistamiento actual, lo más probable es que se trate de una mascota ilegal abandonada o escapada, ya que Italia tiene estrictas leyes sobre tenencia de animales peligrosos.

Mientras las autoridades piden calma y verifican cada pista, Ladispoli vive horas de tensión entre la expectación y el miedo.