Von der Leyen es elegida por el PPE como candidata a las elecciones de junio con una elevada abstención

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha sido elegida este jueves por parte del Partido Popular Europeo (PPE) como candidata a un segundo mandato al frente del Ejecutivo comunitario, en un proceso en el que partía como única aspirante.

En un voto secreto y depositado en urna, la candidatura de Von der Leyen ha salido victoriosa con 400 votos a favor y 89 en contra y más de 300 abstenciones, ya que el PPE cuenta con 801 delegados. Un resultado que evidencia el poco éxito de una corriente en contra y a favor de un candidato alternativo, pero también que Von der Leyen sigue sin suscitar gran entusiasmo en parte de su partido, para quien se ha orillado demasiado a la izquierda y a los verdes durante su primer mandato.

La delegación francesa, Los Republicanos, han votado en contra de Von der Leyen, ya que acusan a la política alemana de una “deriva tecnocrática”. Dos partidos conservadores eslovenos también han anunciado su voto de rechazo al considerar que su liderazgo ha sido débil. Los populares españoles han votado a favor, tal y como ha anunciado Alberto Nuñez Feijoo de manera pública.

La primera legislatura de Von der Leyen ha estado marcada por la pandemia, la invasión Rusia de Ucrania, la crisis energética y la lucha contra el cambio climático. Esto último le ha granjeado la enemistad de buena parte de su partido, que cree que ha ido demasiado lejos en sus postulados a favor de las transición energética, y la cólera del campo, que acusa a Bruselas de ser la responsable de su empobrecimiento por sus directrices medioambientales y que han multiplicado sus protestas en todo el territorio comunitario en las últimas semanas.

Consciente de todo esto, en las últimas semanas Von der Leyen ha aprovechado su despacho del edificio Berlaymont en la capital comunitario, donde también reside, para empezar a hacer campaña y seducir a los más indecisos. Todo indica que centrará su segundo mandato en la Defensa y que, al menos de cara a las elecciones europeas, está dando marcha atrás en algunas iniciativas sobre el cambio climático con el ánimo de ganarse las simpatías del mundo rural.

El PPE, el más votado

Nadie duda de que el Partido Popular volverá a ser el más votado ya que lidera de manera cómoda las encuestas, pero los sondeos también vaticinan a giro hacía la derecha tras las elección del 9 de junio, ya los partidos euroescépticos pueden acabar ganando bastante terreno. Esto obligará a Von der Leyen a conseguir no sólo el apoyo de socialistas, verdes y liberales ( quienes la han sostenido durante su primer mandato) sino también granjearse las simpatías del grupo de los Conservadores y Reformistas europeos (ECR por sus siglas en inglés), fuerza política en la que se encuadran partidos como Ley y Justicia polaco, Vox o Fratelli d’Italia de la primera ministra Giorgia Meloni. Fuerzas con unas posiciones más moderadas que los postulados de partidos eurófobos como los de Marine Le Pen y Geert Wilders, pero con tintes euroescépticos y soberanistas.

Von der Leyen ha aprovechado su intervención para arremeter contra los “amigos de Putin” y “populistas, nacionalistas y demagogos” cuyo objetivo reside en “destruir” la Unión. “No debe haber dudas de lo que está en juego en estas elecciones. Nuestra Europa en paz y unida está en riesgo como nunca antes”, ha asegurado, mientras alertaba contra la extrema derecha y también la extrema izquierda.

Acercamiento a Meloni

Unas palabras que hacen difícil que pueda pactar en la Eurocámara con el húngaro Viktor Orban o el Reagrupamiento Nacional de Marine Le Pen, conocidos por sus posiciones prorrusas, pero que deja margen de entendimiento con el partido de Giorgia Meloni que previsiblemente va a arrasar en las próximas elecciones europeas.

A pesar de estas palabras, lo cierto es que el manifiesto del Partido Popular Europeo, aprobado en esta cumbre de Bucarest (Rumanía) supone un endurecimiento de las tradicionales posturas de la familia conservadora respecto a la inmigración y el cambio climático, lo que les acerca a partidos más a la derecha.

En el primer ámbito, se señala como posible modelo los centros de internamiento para inmigrantes en terceros países, al igual que ha hecho Reino Unido en Ruanda, y en cuanto al cambio climático se asegura que deben ser “los ingenieros, no los políticos, junto al mercado, los que decidan la mejor tecnología para conseguir la neutralidad climática” . En anteriores borradores se había considerado poner en cuestión la normativa ya aprobada para prohibir en el año 2035 la venta de coches de primera mano de gasolina, gasoil e híbridos, pero se ha acabado desechando esta alusión.

Tras las elecciones europeas, Von der Leyen deberá conseguir el apoyo de los Veintisiete ( si no puede ser por consenso, la votación puede salir adelante con mayoría cualificada) y la luz verde de la Eurocámara. En 2019, consiguió salir elegida con una mayoría estrecha de nueve votos en un voto secreto depositado en urna que puede deparar sorpresas en el último momento.