Francia: "Tanta ira y destrucción parece desproporcionada para la mayor parte de Europa"

Nueva jornada de huelga y protestas en Francia. Ya la décima. El presidente Emmanuel Macron no logra acallar las manifestaciones contra el "decretazo" y la polémica reforma de las pensiones. Ante la crisis en la que está sumido el país vecino, preguntamos al experto Paul Smith al respecto. Según Smith, profesor de Historia y Política francesas en la Universidad de Nottingham, "gran parte de este enfado es contra Macron, no contra la reforma".

El ministro del Interior, Gérald Darmanin, aseguró ayer que se habían desplegado 13.000 policías, 5.500 de ellos sólo en París. Según Darmanin, este número récord se justifica por el «riesgo importante para el orden público». ¿Tiene miedo el Gobierno francés a una nueva jornada violenta?

Hay otra cara de la historia, y es que algunos de los partidarios del presidente Emmanuel Macron en el grupo Modem están sugiriendo que el Gobierno utilice las próximas tres semanas como una oportunidad para reabrir el diálogo. Eso es lo que Macron ha encargado a la primera ministra, Élisabeth Borne, que haga. Sin embargo, parece que se ha producido una escalada de violencia y puede que el Gobierno francés sienta que tiene que reforzar la seguridad en el evento. Puede que el Gobierno tenga miedo o puede que no, pero podría estar esperando un «momento Arco del Triunfo», llamado así por el ataque al monumento de los «chalecos amarillos», que ciertamente hizo que Macron recuperara parte del control.

¿Cómo puede curarse esta crisis social en Francia?

Se ha hablado de la posibilidad de que Emmanuel Macron recurra al artículo 10, que le permite pedir al Parlamento que reconsidere un proyecto de ley, pero parece poco probable.

Lo cierto es que Francia tiene una de las mejores edades para jubilarse (en España ya ha subido hasta los 67 años). ¿Es necesaria esta reforma de las pensiones en Francia?

En Reino Unido también. Tanta ira y destrucción por esto parece desproporcionada para la mayor parte de Europa, pero la izquierda y la extrema derecha son en parte responsables de hacer promesas que no tendrán que cumplir. Marine Le Pen, en particular, se ha beneficiado enormemente al no decir precisamente nada. ¿Se enfrenta el sistema al colapso? Si eres Emmanuel Macron, sí. Pero Jean-Luc Mélenchon y Le Pen y los sindicatos piensan que se puede financiar de otra manera o que el modelo francés es único y vale la pena preservarlo. Parece que muchos franceses piensan lo mismo, aunque no lo hayan pensado bien. Gran parte de este enfado es contra él, contra Macron, no contra la reforma.

Parece que el presidente Emmanuel Macron no es muy popular entre los ciudadanos franceses, le tachan de «señor perfecto», «Júpiter»... En este contexto y sabiendo que no goza de simpatía popular, ¿podría haber sido mejor su actitud respecto a la importancia de la medida para la sociedad francesa?

Macron lo ha gestionado muy mal. Con esta reforma necesitaba llevar a los sindicatos con él. Macron y el Gobierno de Borne han fracasado. Hace falta mucho para enfadar a la CFDT (Confederación Francesa Democrática del Trabajo), pero Macron lo ha conseguido. Y no ha hecho más que subrayar la opinión de que sólo puede pensar «verticalmente» y es incapaz de interactuar con el «cuerpo intermedio», las partes interesadas en este asunto. Júpiter cree que lo sabe todo...

Podría parecer postureo, pero no lo es.