Francisco Santos: «El Gobierno le ha dado la vuelta a las cosas para volver a lo mismo»

Es primo del presidente Juan Manuel Santos y, en el terreno político, uno de sus rivales ideológicos más incómodos. Francisco Santos, ex vicepresidente de Colombia en el periodo presidencial de Álvaro Uribe, critica las reformas hechas a los textos de La Habana y lamenta que el Gobierno no haya querido escuchar «la voz del pueblo».

–¿Darán su apoyo al nuevo acuerdo con las FARC?

–Una primera mirada al acuerdo nos deja muy desilusionados. Siento que se perdió una gran oportunidad. Vemos que en temas fundamentales no se ha llegado a donde los colombianos exigían, porque no se trata de cumplir la voluntad de una sola persona sino de 6,5 millones de personas que votaron de forma democrática por el «no» a temas como el de la elegibilidad de los criminales en el Congreso, las penas de cárcel, el narcotráfico, la justicia y las víctimas, que quedaron totalmente en el aire. La gente votó en contra por estos asuntos fundamentales. Nadie quiere ver a «Timochenko» en el Congreso en 2018, y lo va a ver. En definitiva, el Gobierno le dio la vuelta a las cosas para llegar otra vez a lo mismo.

–¿Han hablado con las víctimas sobre estas reformas del texto?

–Estuve ayer con tres representantes de las víctimas y aseguran que no ha cambiado nada. Es un asunto que ni siquiera se discutió. Pero es un capítulo que necesita muchos cambios. Por ejemplo, los victimarios tienen que enfrentarse a las víctimas. El acuerdo actual permite que el comandante del Frente 32 de las FARC pueda decir que violó a dos niñas, secuestró a 57 personas y asesinó a 200. Le basta con entregar su confesión en una carta y adiós. No tendrá que enfrentarse al testimonio de sus víctimas. Por tanto, este acuerdo es irrespetuoso con ellas porque no las tiene en cuenta.

–¿Cree que el presidente evitará la convocatoria de otro plebiscito para refrendar el pacto?

–No lo sé, pero lo triste es que se genera un antecedente muy grave al no escuchar el resultado de un plebiscito. En Reino Unido, el referéndum del Brexit produjo la salida de la UE. En Colombia, el plebiscito produjo unos cambios cosméticos y 120 horas de reuniones. Nada más. En todo caso, produjo insatisfacción. Me preocupa el precedente de no escuchar la voz del pueblo.

–La comunidad internacional celebra esta reforma a los textos de La Habana...

–Me preocupa que los países apoyen una política en la que no se tiene en cuenta a la sociedad colombiana. Los países alaban la decisión de un nuevo acuerdo y resulta que no es así, porque no hubo un nuevo pacto, sólo cambios muy cosméticos.

–¿Confía en que se acepten nuevas reformas?

–El Gobierno ha dicho que es definitivo. Pero lo que habíamos pactado las dos partes es que nos iban a dejar ver el texto para discutir. Sin embargo, decidieron hacer un acuerdo definitivo violentando la decisión popular.

–Si finalmente se aprueba, ¿qué harán los partidarios del «no»?

–Estamos mirando todas las opciones, pero no nos vamos a quedar quietos.

–¿En qué posición quedan ahora las FARC?

–Las FARC se están poniendo en riesgo ante la Corte Penal Internacional, los jueces americanos y ante nuevos gobiernos.

–Si no hay plebiscito, ¿serán las elecciones de 2018 otro plebiscito sobre la paz?

–Seguro. Se trasladará el debate al año 2018 y nos vamos a enfrascar en ese debate desde ya.