«Grillinos» y Liga presentan hoy su programa y su Gobierno al presidente Mattarella

A falta de desvelar el nuevo «premier», Salvini se perfila como titular de Interior y Di Maio de Trabajo.

Han pasado 78 días desde las pasadas elecciones generales en Italia. Y en ese tiempo se dio por un hecho un pacto entre la Liga y el Movimiento 5 Estrellas (M5E), se enfrío, se asumió que se repetirían las elecciones y hoy, por último, parece que terminará el culebrón. Italia siempre depara sorpresas, pero hasta aquí. Este lunes ambos partidos deberían formalizar el nuevo Gobierno italiano, el primero en un gran país europeo liderado por fuerzas euroescépticas.

El líder de la ultraderechista Liga, Matteo Salvini, afirmó este domingo que habían cerrado junto a sus socios “un primer ministro y un equipo de gobierno”. Era el último escollo que quedaba, tras haber firmado lo que ambos definen como el “contrato del cambio”. Como se esperaba, ni Salvini ni Luigi Di Maio, líder del M5E, presidirán el Ejecutivo, aunque ambos se muestran dispuestos a “dar la cara”.

Es decir, que los dos líderes podrían ocupar carteras ministeriales. La prensa italiana menciona que Di Maio se encargaría del Ministerio de Trabajo, para aplicar la renta de ciudadanía que convirtió en medida estrella; y Salvini de Interior, ya que inmigración y seguridad han sido sus banderas. Si el programa de gobierno tiene un corte más leguista, el premier procedería de la órbita del M5E.

En las quinielas se sitúa como favorito Giuseppe Conte, un jurista de 54 que no ha ocupado hasta ahora cargos políticos. Su margen de maniobra sería, de todos modos, escaso, puesto que debería limitarse a cumplir un programa ya acordado entre ambos partidos. Ese acuerdo menciona que en caso de discrepancias se reuniría un comité formado por el primer ministro y representantes de ambas fuerzas políticas, lo que ya ha sembrado dudas entre algunos constitucionalistas.

Liga y M5E acudirán este lunes al palacio del Quirinale para detallar el acuerdo ante el presidente de la República, Sergio Mattarella, quien debería conferir el encargo de formar Gobierno al primer ministro propuesto. El jefe de Estado ha mostrado hasta ahora una paciencia infinita, como demuestra que no haya intervenido directamente, esperando que los partidos fueran capaces de encontrar una solución política al bloqueo.

Más tarde el Ejecutivo deberá someterse al examen del Parlamento, donde Liga y 5 Estrellas suman más del 50 por ciento tanto en la Cámara como en el Senado. En Italia la importancia de ambas cámaras es idéntica y mientras en la Cámara de Diputados el Gobierno tendría una mayoría holgada en el Senado sólo tendría un margen de siete escaños. El Ejecutivo quedaría en posición de debilidad, en un país acostumbrado a continuos cambios de chaqueta.

Las críticas desde Europa continuaron este domingo. Las últimas, del ministro de Economía francés, Bruno Le Maire, que pidió “reducir las divergencias económicas o el euro estará debilitado”. Liga y M5E plantean también la cancelación de las obras de un tren de alta velocidad entre Italia y Francia que ya han comenzado. Salvini respondió que el comentario desde París era “otra invasión de campo”.

En apenas unos meses Matteo Salvini ha pasado de ser percibido como un extremista de derechas a ser el líder más valorado para los italianos. En una encuesta realizada por el instituto Demos y publicada este domingo por el diario La Repubblica, el líder de la Liga contaría con la aprobación del 52% del conjunto de los electores. En segunda posición se situaría el primer ministro en funciones, Paolo Gentiloni. La Liga consiguió un 17% en los anteriores comicios, pero de repetirse podría llegar hasta el 25% según las encuestas.