Protestas en Francia

Guerra total entre los sindicatos y la izquierda en Francia: «No es momento de acciones sindicales, sino de luchar contra estos “parásitos”»

Las izquierda francesa denuncia el comunicado conjunto de Alliance Police National y Unsa Police, que dibuja un escenario «en guerra» después de tres jornadas de disturbios

A police officer aims during a protest Friday, June 30, 2023 in Strasbourg, eastern France. French President Emmanuel Macron urged parents Friday to keep teenagers at home and proposed restrictions on social media to quell rioting spreading across France over the fatal police shooting of a 17-year-old driver that has resulted so far in the arrests of more than 800 people. (AP Photo/Jean-Francois Badias)
France Police ShootingASSOCIATED PRESSAgencia AP

«No es el momento de la acción sindical, sino de la lucha contra estos “parásitos”», recoge un comunicado conjunto emitido este viernes por los sindicatos de policía franceses Alliance Police Nationale y Unsa Police, en el marco de la cuarta jornada de disturbios tras la muerte del joven Nahel a manos de un agente del suburbio parisino de Nanterre.

«Hoy, la policía está en combate, porque estamos en guerra. Mañana estaremos en resistencia, y el Gobierno tendrá que darse cuenta de ello», subraya la misiva, cuyo contenido ha desatado una oleada de reacciones en redes sociales y críticas procedentes de los sectores de la izquierda francesa.

Los sindicatos de policía exigen «poner todos los medios para restablecer el Estado de derecho lo antes posible». «Una vez restablecido, ya sabemos que volveremos a vivir el mismo caos que venimos soportando desde hace décadas», denuncian los agentes, que han decidido expresar en términos contundentes su malestar después de haber hecho frente en las calles a una serie de movilizaciones violentas en los últimos años, con un recuerdo especialmente amargo de la revuelta de los chalecos amarillos de 2018.

Personalidades de la izquierda francesa de la talla de Jean-Luc Mélenchon, excandidato presidencial de La Francia Insumisa, o de la secretaria nacional de Europa Ecología Los Verdes (EELV), Marine Tondelier, criticaron a los agentes por el contenido del comunicado, que calificaron como una «amenaza de sedición» y un claro «llamamiento a la guerra civil».

Mélenchon les instó a «mantener la boca cerrada». «Hemos visto el comportamiento asesino al que conduce este tipo de discurso», escribió en Twitter.

El líder de la izquierda francesa pidió al «poder político» que «tome las riendas de la policía», antes de concluir: «Los que quieren la calma no echan aceite al fuego».

El diputado rebelde François Ruffin también se pronunció en contra de la misiva: «Los sindicatos de policía dicen que están “en guerra”, y preparan la “resistencia”, incluso contra el Gobierno». En este sentido, la ecologista Tondelier tuiteó: «¿Ahora podemos decir que hay un problema estructural en la policía? Este texto es un llamamiento a la guerra civil». Su compañera de filas, Sandrine Rousseau, remató, calificando el comunicado como «una amenaza de sedición».