La India continúa estrechando lazos con Moscú en un contexto de creciente tensión con Pakistán, que hace apenas unos meses se materializó en un nuevo intercambio de ataques entre ambas potencias, motivado por el histórico conflicto en la región disputada de Cachemira. Una aproximación entre Nueva Delhi y el Kremlin resulta especialmente significativa en los ámbitos militar y energético.

Desde el estallido de la guerra en Ucrania, las importaciones de petróleo ruso por parte de India han aumentado considerablemente. Este incremento generó malestar en varias capitales occidentales, que acusaron a Nueva Delhi de contribuir indirectamente a financiar el conflicto. Sin embargo, el gobierno indio ha defendido en todo momento su posición, afirmando que mantiene una política exterior independiente y neutral.

Este viernes, representantes de alto nivel de ambos países celebraron una nueva reunión bilateral, en la que participaron el ministro de Defensa de India, Rajnath Singh, y su homólogo ruso, Andrey Belousov. El encuentro tuvo lugar en los márgenes de la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái, celebrada en la ciudad china de Qingdao, y fue calificado por Nueva Delhi como "una de las reuniones más importantes en los últimos tiempos".

Aumento de producción en áreas críticas

Según informó la agencia EFE, durante la reunión el ministro Singh hizo hincapié en la necesidad de acelerar el suministro de sistemas estratégicos, como el sistema de defensa aérea S-400 'Triumph', desarrollado por Rusia, así como avanzar en la modernización de la flota de cazas Su-30MKI de fabricación conjunta. En las conclusiones de la reunión queda recogido como Nueva Delhi planteó la necesidad de aumentar la producción "especialmente en áreas críticas como la defensa aérea, los misiles aire-aire, las capacidades modernas y la modernización de las plataformas aéreas".

Cabe recordar que India y Rusia firmaron en 2018 un acuerdo para la adquisición de cinco escuadrones del sistema S-400, valorado en aproximadamente 5.400 millones de dólares. No obstante, la entrega del armamento ha sufrido varios retrasos, a lo que suman las presiones internacionales. Esta transacción generó tensiones con Estados Unidos, que advirtió a India sobre la posibilidad de aplicar sanciones en virtud de la ley CAATSA (Ley para Contrarrestar a los Adversarios de Estados Unidos a Través de Sanciones", al considerar que la compra vulneraba sus restricciones a la cooperación con el sector militar ruso.

Así son el S-400 y el Su-30 MKI

El S-400 'Triumph' es considerado como uno de los sistemas de defensa aérea más avanzados del mundo. Puede interceptar múltiples amenazas aéreas, incluidos misiles balísticos y aviones furtivos, con un alcance de hasta 400 kilómetros. Utiliza diferentes tipos de misiles según la amenaza y ha sido concebido para operar en entornos complejos de guerra electrónica.

Por su parte, el Su-30MKI es un caza bimotor de cuarta generación, desarrollado conjuntamente por Rusia y la India. Está equipado con radar de control de fuego N011M Bars, misiles aire-aire de largo alcance y tecnología compatible con estándares tanto rusos como indios, lo que lo convierte en una pieza clave del poder aéreo de la Fuerza Aérea India.