Polémica

Un informe filtrado del Pentágono revela que los ataques de EEUU solo retrasarán unos meses el programa nuclear de Irán

Trump arremete contra los medios de comunicación que han publicado la información y dice que "las instalaciones nucleares de Irán están totalmente destruidas"

President Donald Trump speaks with reporters on Air Force One while in flight from Joint Base Andrews, Md., to Amsterdam, Netherlands, Tuesday, June 24, 2025. (AP Photo/Alex Brandon)
TrumpASSOCIATED PRESSAgencia AP

Aunque Donald Trump se mostró triunfalista tras los bombardeos del fin de semana contra instalaciones nucleares iraníes, un informe preliminar del Pentágono sugiere que las cosas no salieron tan perfectas como dijo el expresidente. Según fuentes que conocen el análisis inicial del ataque, dos de los sitios clave no fueron destruidos por completo y, en el mejor de los casos, el programa nuclear iraní se habría retrasado solo unos pocos meses.

El informe, elaborado por la Agencia de Inteligencia de Defensa (DIA, por sus siglas en inglés), señala que equipos esenciales como los centrifugadores podrían volver a ponerse en marcha en poco tiempo. Además, buena parte del uranio altamente enriquecido —ese que podría usarse para fabricar una bomba nuclear— habría sido trasladado antes del ataque, posiblemente hacia otras instalaciones secretas.

Esto contrasta con la declaración que dio Trump en su discurso televisado tras la operación, donde aseguró que los sitios nucleares de Natanz, Fordow e Isfahan habían sido "completamente y totalmente obliterados". Según él, se trató de un "éxito militar espectacular" que obligaría a Irán a buscar la paz.

Pero la información que ha salido desde entonces no cuadra del todo. El sitio de Fordow, por ejemplo, es uno de los más protegidos del programa nuclear iraní: está enterrado bajo una montaña, entre 45 y 90 metros de roca sólida. Y si ya en los primeros días después del bombardeo se concluye que Fordow sigue en pie, es posible que las evaluaciones futuras muestren que el daño fue menor del esperado.

Los medios comenzaron a reportar estos detalles, lo que aparentemente enfureció a Trump. En su red social Truth Social escribió en mayúsculas: “¡LAS INSTALACIONES NUCLEARES EN IRÁN ESTÁN COMPLETAMENTE DESTRUIDAS!”

La Casa Blanca respaldó esa versión y calificó las filtraciones como un intento de "desacreditar al presidente y a los valientes pilotos que llevaron a cabo una misión perfectamente ejecutada".

Por su parte, el vicepresidente JD Vance admitió que todavía no saben dónde está el uranio enriquecido de Irán y que en las próximas semanas buscarán "hacer algo con ese combustible".

El jefe del Organismo Internacional de Energía Atómica, Rafael Grossi, confirmó el lunes que ya no tienen forma de rastrear los 400 kilos de uranio enriquecido al 60% que tenía Irán.

Y para poner las cosas en perspectiva: ya desde enero, expertos del Pentágono habían advertido que ni siquiera las enormes bombas GBU-57 de 30.000 libras podrían destruir totalmente Fordow. De hecho, dijeron que solo un arma nuclear táctica lo lograría.

Durante el ataque, aviones B2 lanzaron una docena de esas GBU-57 sobre Fordow y dos más sobre Natanz. Además, un submarino estadounidense disparó unos 30 misiles Tomahawk contra Isfahan.

El secretario de Defensa, Pete Hegseth, repitió el mensaje de Trump y aseguró que los sitios fueron "obliterados", pero el jefe del Estado Mayor Conjunto, general Dan Caine, fue más cauto. Dijo que hubo “daños severos y destrucción”, pero que todavía faltan evaluaciones completas para saber realmente qué tan efectivos fueron los ataques.