Guerra en Gaza

Israel asegura haber destruido uno de los refugios del líder de Hamás en Gaza

Las FDI filtran las imágenes del presunto búnker de Yahya Sinwar, equipado con «electricidad, sistemas de filtración de aire, tuberías, salas de descanso y oración»

El Ejército israelí asegura haber localizado y destruido uno de los refugios utilizados por Yahya Sinwar, el líder de Hamás en la Franja de Gaza. El presunto búnker del principal cerebro del atentado del 7 de octubre que acabó con la vida de 1.200 personas en suelo israelí habría sido localizado por la 14ª Brigada Blindada de Reserva en las inmediaciones de la ciudad de Gaza, en la zona norte del enclave palestino, según recoge el comunicado de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).

Los miembros de la unidad de ingeniería de combate Yahalom rastrearon la zona y dieron con el acceso a uno de los túneles operado por el Movimiento de Resistencia Islámica. El alto mando militar israelí dice haber encontrado, además, numerosos «hallazgos» que demuestran que Siwar utilizaba el refugio. Pero los hechos no han podido ser verificados de forma independiente.

Las fuerzas israelíes han investigado el pozo, de unos 20 metros de profundidad, que conectaba con un túnel de unos 218 metros de longitud con varios ramales. La excavación contaba con electricidad, sistemas de filtración de aire, tuberías, salas de descanso y oración. Todas estas condiciones en el interior del túnel estaban ideadas para que Sinwar y otros altos mandos de Hamás y su brazo militar pudieran refugiarse en su interior y permanecer ocultos y atrincherarse durante largos periodos de tiempo, de acuerdo con las FDI.

«Una vez finalizadas las actividades de exploración y las operaciones llevadas a cabo a lo largo de la ruta, el túnel fue destruido por los combatientes de la unidad Yalam», añade el comunicado.

La extensa red de túneles subterráneos de las milicias palestinas en Gaza es uno de los principales desafíos que enfrentan las fuerzas israelíes, que intentan detectarlos y destruirlos para frenar las emboscadas de Hamás y acabar con su estructura armada y política, que se cree que en gran medida permanece ahora bajo tierra.

Sinwar, por su parte, sigue siendo la gran prioridad del Ejército de Israel. En ocasiones anteriores el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha llegado a apuntar que las tropas podrían haber cercado su posición, unas declaraciones que fueron corregidas por el propio Ejército. Mientras buscan a la cabeza visible de Hamás, que fue identificado por algunos de los rehenes liberados en el último acuerdo de alto el fuego, las fuerzas israelíes mantienen su ofensiva militar en Gaza en la que es la 84 jornada de guerra, que se ha cobrado ya cerca de 22.000 víctimas mortales y cientos de miles de desplazados internos.

En este sentido, el alto representante para la Política Exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, ha exigido a Israel establecer una «nueva pausa» en su ofensiva tras los últimos bombardeos en los campos de refugiados de Maghazi, que calificó como uno de los más mortíferos. Los muertos se cuentan por decenas en las últimas 24 horas en los campamentos de refugiados del corazón de Gaza.

«Urge una nueva pausa en las hostilidades», señaló el jefe de la diplomacia europea en la red social X (antes Twitter). El también vicepresidente de la Comisión señaló que la ofensiva de Israel «continúa causando un gran número de víctimas a pesar de la obligación de las Fuerzas de Defensa de Israel de proteger a los civiles».

Escalada controlada en la frontera con Líbano

El Ejército israelí ha reconocido que las últimas operaciones llevadas a cabo en la frontera con Líbano tienen el objetivo de hacer que el partido-milicia chií Hizbulá recule y se aleje de la frontera israelí. «En los últimos dos días completamos una serie de ataques generalizados con aviones de combate, tanques y artillería contra objetivos de Hizbulá», ha detallado el portavoz de las FDI, Daniel Hagari. De acuerdo con la versión del Ejército, estos ataques han permitido a Israel alcanzar objetivos en todo el territorio objetivo, incluidas zonas de lanzamiento de misiles, complejos militares e infraestructura empleada por los milicianos de Hizbulá. «Además, atacamos células terroristas y matamos a terroristas en el terreno y en los edificios (...) Seguimos llevando a cabo intensos ataques y dañando el despliegue de Hizbulá, que estaba cerca de la frontera norte», ha manifestado el propio Hagari.

Así las cosas, el portavoz militar israelí ha recalcado que la respuesta a la amenaza que representa Hizbulá ha hecho que la milicia libanesa «no tenga el mismo aspecto» que a comienzos de octubre, fecha en que estallaron las hostilidades en la región.