Oriente Medio

Israel vetará la entrada al país de dos congresistas norteamericanas musulmanas

Trump alertó de que las demócratas “odian a Israel y a todo el pueblo judío"

Ilhan Omar y Rashida Tlaib durante una rueda de prensa tras el ataque de Trump/Efe
Ilhan Omar y Rashida Tlaib durante una rueda de prensa tras el ataque de Trump/Efelarazon

El Ministerio de Interior de Israel ha confirmado que vetará la entrada al país de Rashida Tlaib y Ilhana Omar, dos congresistas norteamericanas de origen musulmán del Partido Demócrata

El Ministerio de Interior de Israel ha confirmado que vetará la entrada al país de Rashida Tlaib y Ilhana Omar, dos congresistas norteamericanas de origen musulmán del Partido Demócrata, que apoyaron en el pasado el boicot al estado judío.

Tras días de intensos rumores, el ministro de interior israelí Arieh Dery confirmó la prohibición en una carta enviada a los medios: “la decisión fue tomada tras comprobarse que la visita preveía activismo en favor del boicot a Israel”. Dery, que aseguró haber recibido pleno apoyo del primer ministro Benjamín Netanyahu, consideró que las parlamentarias pretendían aprovecharse de su estatus político para dar apoyo a organizaciones pro-boicot.

La prensa israelí avanzó las presiones que llegaron desde la Administración Trump, que finalmente surgieron efecto: “el estado de Israel respeta al Congreso de EE.UU. como parte de nuestra sólida alianza. Pero es inconcebible que acepte la entrada al país de personas que intentan dañar al país”, continuó el comunicado.

Tlaib, que es de origen palestino y tiene familia residiendo en un poblado de Cisjordania, tenía previsto aterrizar junto a Omar este fin de semana para recorrer Israel y los territorios palestinos. Ron Dermer, embajador israelí en Washington, aseguró a principios de semana que no se les denegaría la entrada al país, pero surgieron informaciones de que en el ejecutivo de Trump no estaban satisfechos con la medida.

Horas antes del comunicado emitido por el ministro de interior, el propio Trump alertó en un mensaje de Twitter: “Israel mostraría una gran debilidad en caso de permitir el acceso a Rashida Tlaib y Ilhana Omar”. Y agregó: “odian a Israel y a todo el pueblo judío, y no hay nada que hacer para que cambien de opinión. ¡Son una desgracia”.

El presidente norteamericano llevaba semanas cargando con dureza contra las parlamentarias, incluso usando insultos racistas contra ellas y otras dos representantes, sugiriendo que regresen a sus países de origen, pese a que 3 de las 4 son nacidas en EE.UU.

La viceministra de Exteriores de Israel Tzipi Hotolevy, del partido gubernamental Likud, expresó en la televisión pública la razón de la decisión: “no permitiremos la entrada a quienes deniegan nuestro derecho a existir en este mundo. Se trata de una decisión plenamente justificada”.

La medida fue duramente criticada por parlamentarios de izquierda y representantes árabes de la Knesset israelí, así como por algunos sectores del Partido Demócrata en EE.UU. “Un país democrático no puede denegar la entrada de dos representantes públicas de una democracia aliada, además del daño que supone a las ya de por sí delicadas relaciones con el Partido Demócrata”, protestó Tamar Zandberg de la formación izquierdista Meretz.

La influyente organización judía norteamericana American Jewish Comitee (AJC), remarcó que si bien “no es una decisión inteligente” vetar la entrada a Israel de Tlaib y Omar, tenían constancia de que ambas tenían prevista una agenda de visitas con una remarcada agenda antiisraelí.

“Cuando anunciaron sus planes, el gobierno de Israel afirmó que permitiría su entrada, a pesar de su evidente hostilidad hacia el estado judío y su apoyo indiscutible al movimiento pro-boicot BDS”, indicó el AJC en una nota de prensa. Y prosiguió: “esta decisión, que el AJC apoyó plenamente, fue tomada por el respeto a dos integrantes del Congreso de EE.UU., y por el hecho de que Israel se enorgullece de ser una democracia abierta y plural”.

Según hizo constar el organismo judío, Tlaib y Omar no tenían prevista en su visita ninguna reunión con políticos israelíes, oficiales o charlas con expertos. “La negativa de las parlamentarias de incluir a voces israelíes demuestra que no se trataba de un ejercicio de buscar balances, sino de una misión de propaganda”, continuó el comunicado.

Desde las filas demócratas, el veterano Bernie Sanders declaró que “la decisión de denegar la entrada a Tlaib y Omar supone una enorme falta de respeto hacia dos representantes electas, y hacia los propios principios democráticos. Israel debería retirar de inmediato la prohibición”. En redes sociales, activistas israelíes destacan que “mientras se permite la entrada de Trump, Bolsonaro, Orbán, Duterte o Putin, se les prohíbe a Tlaib y Omar”.