Jean-Claude Piris: «La secesión de Cataluña concierne a toda la UE»

-¿Qué opinión le merece lo que está ocurriendo en Cataluña y la sed de independentismo, basada en el «derecho a decidir»?

-Siempre he dicho que es muy peligroso hacer creer a la gente en algo cuando sabes que no es posible conseguirlo. Para ser honesto, hay obstáculos y esta historia del independentismo de Cataluña no sólo concierne a España sino también al resto de países de la UE y a Europa en sí misma. Y en cuanto al derecho a decidir, éste no existe en la legislación internacional. Lo importante es que no se mal informe sobre la relación con la UE.

-¿Por qué concierne también al resto de países de la UE si se trata de un asunto interno?

-Por el riesgo de contagio. Porque cuando tuvo lugar el referéndum en Escocia, pudimos ver cómo en Cataluña se aprovechó para impulsar los mensajes para su propio independentismo... Y ahora lo que ocurre en España podría ser contagioso para otros países como Alemania, Italia, Francia, Bélgica... para muchos países. Se acabaría la estabilidad y lo que le interesa a la UE es incrementar sus miembros y no tener países divididos. Y ningún Estado va a reconocer a Cataluña si tiene miedo de que le pueda ocurrir lo mismo.

-Europa empieza a preocuparse por las cuestiones nacionales...

-Ahora hay tanta interdependencia en la Unión Europea que las elecciones nacionales tienen mucha importancia. Hace unos años nadie se interesaba por las elecciones nacionales, a nadie le importaba quién ganaba los comicios en Alemania o Grecia o España... y ahora todos los países saben que todo está relacionado y tienen que tener en cuenta los comicios, incluso los regionales. Si un país se divide en dos partes, o tres, puede ser el comienzo de más ruptura... y que luego venga en el caso de España el País Vasco, Galicia...

-Si Cataluña no podría llegar a ser un Estado europeo porque violaría uno de los requisitos para serlo (respetar el Estado de derecho), ¿que futuro le podría deparar a una Cataluña independiente?

-La UE está basada en el respeto a la Ley, y una de las condiciones para entrar a formar parte de la UE, bueno, mejor dicho a ser candidato, no sólo es ser un Estado, sino ser un Estado europeo que respete la ley constitucional, los Derechos Humanos, etc. Entonces, cuando veo lo que se dice, me quedo perplejo de oír tantas mentiras. Lo mismo ocurrió en Escocia, se mintió e intenté dar mi opinión incluso en el Parlamento para decir la verdad. No salgo de mi asombro cuando en Cataluña dicen que van a llevar a cabo una declaración de independencia y luego pedir entrar en la UE. Eso no funciona así. Estamos basados en el Estado de derecho y en los Tratados. Y los Tratados imponen como condición el respeto al Estado de Derecho. Hay que respetar la ley internacional, la europea y la nacional y en este caso claramente no están respetando la ley nacional, la Constitución.

-¿Entonces qué supondría una declaración de independencia?

-Nada. La declaración quedaría como una declaración vacía, muerta. Además, no se trata de tener una declaración, lo importante es ser reconocido por la comunidad internacional, por unanimidad de los Veintiocho, y los países de la UE no reconocerán a Cataluña como un Estado.

-¿Cuál es el objetivo de Artur Mas?

-No sé. Yo no critico en lo que la gente cree, pero debemos decir la verdad a los votantes y parece que en este caso el objetivo es influenciarlos. Será para contar con un texto político e intentar influenciar, pero no será una declaración de independencia. Y además, creo que tener esto en el debate es un craso error. Cataluña tiene una personalidad especial, pero eso puede seguir ahí, no está prohibido. Los Tratados no lo prohíben sino que además fomentan esa pluralidad...

-¿Por qué desde Bruselas no se habla claro sobre este asunto?

-Porque así es el protocolo. Así es la vieja diplomacia de no meterse en asuntos internos. Incluso cuando estos días la canciller alemana, Angela Merkel, ha hablado sobre el tema siempre ha comenzado diciendo claramente que se trata de un asunto interno.

-¿Y cómo le suena hablar de independentismo a quien consideran el padre del Tratado de Lisboa?

-El objetivo es unirse y ser más grandes y más capaces de generar políticas comunes en cambio climático, economía...Tenemos que estar juntos para luchar contra todos los desafíos. Somos demasiado pequeños. No se no trata de dividirse en pequeñas piezas.

-Y siguiendo con rupturas... ¿qué opina sobre el referéndum británico para decidir su permanencia o no en la UE?

-Reino Unido tiene derecho a hacer el referéndum, pero honestamente hablando no creo que vaya a salir de la UE. Es demasiado lo que tiene que perder económica y políticamente el país. Y a la gente no le gusta la aventura. Fuera de la Unión Europea, ¿para qué? Tendremos más o menos prosperidad económica... a mi juicio, los comentarios se sitúan más en el lado negativo. Y también en lo que se refiere a los mercados se tienen que respetar las reglas. Tenemos que tener las mismas reglas en productos, su comercialización... y si estás fuera de la UE te puede pasar como a Islandia, que en origen tienen que respetar las reglas del mercado pero no pueden participar en las decisiones. ¿Eso sería posible de aceptar para Reino Unido? Se podrían salir si quieren pero auguro entonces un largo y duro periodo para el país.

-Y sobre ese afán de algunos países por cambiar los Tratados...

-Cambiar los Tratados para el tema británico no será posible por un tema de sustancia y calendario. En sustancia, no será posible tener unanimidad y en calendario, porque no se podrá hacer rápido. ¿Y quién daría el paso para el cambio? Primero los británicos sin saber si se cambiarían los Tratados o primero los 27 sin saber si los británicos aceptarían quedarse? La solución para los británicos pasa por mantenerse en la UE y si yo estuviera en el puesto de David Cameron optaría por la opción de un escenario donde no se cambien los Tratados sino que se busque conseguir algún cambio institucional o pedir nuevas políticas...

-¿Y sería posible modificarlos más a largo plazo?

-Si se quiere cambiar los Tratados, lo primero que hay encima de la mesa son las bases de la eurozona y en el clima actual no sería posible hacerlo ahora. Necesitamos esperar un escenario mejor, no sólo por la crisis griega sino por la crisis de la eurozona en su conjunto.Habrá cambios en los Tratados y una Europa de dos velocidades, pero ahora no es el momento. Es necesaria una mejor situación económica y un mejor ambiente político.

-¿Dos velocidades, con el eje franco-alemán liderando una de ellas?

-Si la economía va bien se podrá abrir este tema y se puede abrir efectivamente en la dirección de las dos velocidades. Francia y Alemania van juntos en algunos temas, pero no lo suficiente. La filosofía política de los franceses y los alemanes es muy diferente. Fueron el motor de la creación europea, después de ser los mayores enemigos, y hay que reconocer que cuando se ponen de acuerdo en algo, hay más opciones de que el resto también lo haga.

-Veremos si lo consiguen en uno de los mayores desafíos de ahora, la crisis de los refugiados.

-Yo creo que la gente entiende que no se puede dejar a los países solos frente a desafíos como éste. Dejar a Hungría sola, a Italia sola, a Grecia sola... a España sola... España, por cierto, ha hecho un buen trabajo en tema migratorio, negociando con países como Marruecos, pero no hay que olvidar que tenemos que ser solidarios entre nosotros.