Karim Ghellab: «Maruecos puede ser la solución a la falta de competitividad de la economía europea»

Karim Ghellab, presidente del Parlamento marrroquí desde diciembre de 2011, tiene, a pesar de su juventud, una larga carrera política a sus espaldas. En el último Gobierno de Abbas el Fassi como ministro de Transportes pudo impulsar la construcción de infraestruturas -autovías y ferrocarriles, fundamentalmente- que empiezan a dar rendimientos a la economía marroquí. Ahora, al frente del legislativo, encara una etapa de cambios constitucionales decisivos para el futuro del reino magrebí. Esta semana estuvo en Barcelona para participar en la Asamblea Parlamentaria de la Unión por el Mediterráneo.

- Al proceso Euromediterráneo se le acusa a veces de lentitud y falta de objetivos ¿Ha servido esta reunión para darle un nuevo impulso?

- Lo primero que hay que entender es que la Unión Europea y el sur del Mediterráneo deben solucionar sus problemas juntos, no por separado. Ambas riberas tienen desafíos comunes que sólo se pueden superar si se les aplican soluciones globales. Y eso es lo que tratamos de conseguir con estas reuniones.

- En concreto, ¿qué proyectos han salido de esta cumbre parlamentaria?

- Han salido varios proyectos que vamos a poner en marcha muy pronto. Primero, un plan para fortalecer el papel de la mujer y fomentar la creación de empleo femenino. También hemos estudiado un plan para la gestión del agua. Por último, queremos impulsar "Logistics", una iniciativa enfocada a la creación de plataformas logísticas con las que fomentar la creación de empresas e impulsar el empleo joven en todos los países.

- ¿Son Marruecos y España los verdaderos motores de esta Unión por el Mediterráneo, a pesar de que fue Francia la que "reinventó"el Proceso de Barcelona?

- Es verdad que Francia ha conocido un cambio de presidencia, pero se queda muy implicada en el proceso de la Unión para el Mediterraneo. España es un excelente socio de Marruecos y el próximo 7 de abril celebraremos en Marsella una nueva cumbre para promover la idea de un futuro común en la región. Y el presidente Hollande estará allí para dar un mensaje de compromiso con la Unión por el Mediterráneo.

- ¿Es Marruecos una buena oportunidad económica para empresas y trabajadores españoles?

- Lo es. Es evidente que con la recesión en la que se encuentra Europa, y especialmente España, Marruecos puede ser la solución para mejorar la falta de competitividad gracias a que se pueden reducir los costes de producción.

- ¿Pero esa deslocalización no puede significar desinversiones y mayor paro en España?

- Al contrario. Yo no lo llamaría deslocalización, sino "co-localización". Crear riqueza en Marruecos también significa crear riqueza en España. Se lo explicaré con un ejemplo. Renault abrió recientemente una factoría en Tanger. Y el presidente de la compañía, Carlos Ghosn, dijo que, por cada vehículo que se hace en ella, Francia obtiene 800 euros de crecimiento en su PIB, lo que redunda en nuevas inversiones allí.

- Las relaciones bilaterales entre Marruecos y España han mejorado significativamente desde que tomaron posesión los dos nuevos gobiernos. ¿Qué más se puede hacer para consolidar esa relación?

- Marruecos mantiene buenas relaciones con España, que es su segundo socio y que en enero del año pasado fue el primero. Más de 20.000 empresas españolas exportan a Marruecos. Antes de la crisis financiera que afecta a varios países de Europa, Marruecos ya mostró su voluntad de hacer causa común con España para superar la crisis. A nivel parlamentario, hemos tenido varias visitas y muchas otras están programadas para avanzar en nuestra cooperación. El Foro Parlamentario Marruecos-España, en septiembre 2012, fue una ocasión propicia para hablar de temas de interés común como la economía, la emigración y la movilidad, así como la política de relaciones parlamentarias y de seguridad. Repetiremos la iniciativa el próximo otoño.

- Una vez pasada la Primavera Árabe, muchos piensan que nada ha cambiado. ¿Cuál es su opinión?

- En relación a la Primavera Árabe, se han producido muchos cambios. La ola de levantamientos populares que recorrieron el mundo árabe en general, y en particular los países del norte de África se debió a la falta de democracia y sobre todo a la crítica situación social. Para algunos países la lucha por la democracia continúa. Sin embargo, Marruecos marca una vez más la excepción en la región debido a los cambios que puso en marcha hace 15 años. Marruecos ha conocido transformaciones cualitativas seguidas de cambios institucionales impulsados por la voluntad política de Su Majestad el Rey Mohammed VI y el compromiso de todas las fuerzas de la nación para conducir al país hacia una nueva era que pone a la democracia y el fortalecimiento del estado de derecho como base de una modernización general de la economía y la sociedad.

Marruecos ha iniciado un proceso de reformas y proyectos importantes que van desde la reforma del Código de Familia, que revolucionóel estatus de la mujer en Marruecos, al desarrollo de la Iniciativa Nacional para el Desarrollo Humano o a la creación de la Instancia Equidad y Reconciliación, que ayudó a pasar la página de las violaciónes de derechos humanos en el pasado, y ahora la reforma de la Constitución marroquí desde hace un año y medio. Todas representa un punto de inflexión histórico para completar la construcción del Estado de Derecho en Marruecos.

Uno de los cambios más importantes en nuestra nueva Constitución es la separación del poder, claramente expresada en el primer artículo de la Constitución, que hace hincapié en la responsabilidad del Gobierno, como poder ejecutivo, ante el Parlamento.

- ¿Qué cambios son los más urgentes?

- En cuanto a los países afectados por la primavera árabe, debemos trabajar juntos para fortalecer las transiciones actuales y gestionar el riesgo reforzando la seguridad en la región del Sahel y estableciendo una mejor cooperación en la lucha contra el terrorismo.

En cuanto a Marruecos, el gran proyecto ahora es la nueva regionalización del país, que es estructural y más profunda, si lo comparamos con los concepciones previos de descentralización. Se trata de una nueva arquitectura que rompe con el pasado, y que trata de consolidar la democracia territorial de Marruecos, incluidas las provincias del sur. Implica cambios importantes en la distribución de poderes entre los actores centrales y locales. Es una transferencia de competencias desde el centro hacia la periferia, multiplicará los centros de decisión y los acercará al pueblo.

- La agencia MAP informó a principios de marzo que los tribunales militares no juzgarían a civiles en el futuro. ¿Cuándo entrará en vigor esa legislación? ¿Tiene todavía que discutirse en el Parlamento?

- El Consejo Nacional de Derechos Humanos (CNDH), que es una institución constitucional independiente, recomendó recientemente eliminar la posibilidad de enjuiciar a civiles en los tribunales militares, incluso si están involucrados en crímenes contra miembros de las fuerzas del orden. Esta proposición reformaría la justicia militar, que pasaría a ser competente en tres áreas: sanciones disciplinarias contra militares, contra acciones militares por violación de la seguridad del Estado, o terrorismo.

Esta proposición tiene que ser discutido en el Parlamento para modificar la ley. Pero primero debe ser introducido en el Parlamento por el Gobierno o por miembros de la Cámara.

- La economía marroquí crece a buen ritmo, no obstante ¿no parece que los avances sociales son más lentos?

- Marruecos aboga por un desarrollo sostenible en el marco de un proyecto global que incluye a todos los miembros de la sociedad. Se han emprendido acciones como la Iniciativa Nacional de Desarrollo Humano, para ampliar el acceso a servicios sociales básicos, promover actividades que generen empleo e ingresos estables, ayudar a personas con alta vulnerabilidad o con necesidades especiales.

También se nota la mejora y ampliación de la cobertura de salud, uno de los pilares del desarrollo humano y social del Reino. Se crearon dos regímenes de cobertura médica básica en 2002: el seguro básico de salud obligatorio (AMO) y el Plan de Asistencia Médica (RAMED).

Además, el código de la familia, que para muchos observadores es una revolución política e histórica, establece nuevas relaciones dentro de la familia sobre la base de la equidad y la igualdad entre los cónyuges.

El Código de Trabajo incluye la reducción de la jornada laboral, mejores medidas de seguridad, la salud e inspección del trabajo y la creación de la negociación colectiva, entre otras.

Los programas de desarrollo también han mejorado significativamente las carreteras, el agua y la electricidad en las zonas rurales en la última década.

En este contexto, como le digo, se ha logrado mucho pero aún queda mucho por hacer.

- El Sahara es el problema que todos quieren resolver, pero no parece posible. ¿Se ha producido algún avance diplomático con Argelia?

- El Parlamento marroquí siempre ha impulsado un diálogo abierto y la cooperación. No ha escatimado esfuerzos para explorar una solución política consensuada a este conflicto artificial sobre el Sahara marroquí y la integridad territorial del Reino. La solución propuesta por Marruecos ante las Naciones Unidas contempla una autonomía con amplios poderes bajo soberanía marroquí. Esta autonomía tendría autogobierno, parlamento y recursos económicos y financieros independientes para que los ciudadanos de esta región pudieran gestionar sus asuntos por sí mismos.

Esta propuesta se considera seria y creíble por las Naciones Unidas.

Pero también hay que abordar con urgencia las cuestiones de violaciónes de los derechos humanos que se relacionan con nuestros hermanos secuestrados en los campamentos de Tinduf y el desvío de la ayuda alimentaria, reconocido por la Unión Europea. Se debe realizar un censo de estas poblaciones por el ACNUR y garantizar la libertad de movimiento.