Política

Kiev

Kiev y Moscú se acusan mutuamente

Un separatista prorruso del batallón de Vostok frente a tanques rusos T-64 tanks en Donetsk
Un separatista prorruso del batallón de Vostok frente a tanques rusos T-64 tanks en Donetsklarazon

El hecho de que el avión Boeing 777 de Malaysian Airlines se estrellara en la región oriental ucraniana de Donetsk, epicentro de los combates entre las fuerzas de Ucrania y los rebeldes prorrusos, provocó que las distintas partes involucradas en el conflicto se culparan mutumanete del incidente. El presidente ucraniano, Petro Poroshenko, aseguró a través de un comunicado oficial citado por la agencia de noticias Interfax que la caída de la aeronave se debió a un «acto terrorista». «Poroshenko piensa que el avión fue derribado. No fue un accidente, no fue una catástrofe, fue un acto terrorista», declaró su portavoz, Svatoslav Tsegolko.

Previamente, el mandatario ucraniano había asegurado, según su servicio de prensa, que «en los últimos días, éste es el tercer caso trágico de este tipo, después de que fueran derribados un An-26 y un Su-25. No descartamos que este avión también fuera alcanzado». Además, añadió que «las Fuerzas Armadas ucranianas no realizaban ninguna acción para derribar objetivos en el aire», descartándose así posibles acusaciones en contra de su país.

Mientras, Anton Guerashenko, asesor del ministro del Interior ucraniano, escribió en su perfil de Facebook que el el avión, que volaba a 10.000 metros de altura, cayó en una zona de Donetsk que está controlada por milicianos prorrusos y que fue derribado con un cohete tierra-aire lanzado con el sistema antiaéreo Buk «empleado por terroristas». Este lanzador tiene la capacidad de disparar misiles hasta una altitud de 22.000 metros.

Frente a esas acusaciones, los representantes de la autoproclamada República Ropular de Donetsk aseguraron que ellos no cuentan con armamento capaz de derribar un avión que vuela a 10.000 metros de altura. Además, dijeron estar interesados en esclarecer lo sucedido, por lo que van a permitir que inspectores aéreos internaciones entren a la zona para determinar las causas del siniestro.

Desde Moscú, el presidente ruso, Vladimir Putin, responsabilizó a Ucrania de la caída del Boeing 777. «Sin duda, el Estado sobre cuyo territorio sucedió esto, tiene la responsabilidad por esta horrible tragedia», dijo el mandatario ruso. Putin cargó contra Kiev y manifestó que «la tragedia no habría tenido lugar si en esa tierra hubiera paz, si no se hubieran reanudado las acciones militares en el sureste de Ucrania».

El líder del Kremlin encargó al Gobierno ruso hacer todo lo posible para esclarecer las causas de la caída del Boeing. «Se trata de algo absolutamente intolerable y nadie tiene derecho de dejarlo pasar sin sacar las correspondientes conclusiones y sin obtener información objetiva sobre lo sucedido», exigió el presidente ruso.

El Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) aseguró haber captado una conversación en la que supuestamente los rebeldes prorrusos hablan del derribo del avión malasio. En el vídeo colgado por el SBU en Youtube, se escucha cómo uno de los supuestos comandantes insurgentes informa a su superior sobre el derribo por error de un avión comercial en la región de Donetsk.

Putin y Obama hablan ante el riesgo de una crisis internacional

Varios líderes mundiales pidieron ayer que se abra una investigación urgente para aclarar las inciertas circunstancias en las que se produjo el siniestro de un avión de la compañía Malaysia Airlines en el este de Ucrania. Una «investigación inmediata» fue anunciada por el primer ministro de Malasia, Najib Razak, poco después de conocerse la tragedia del avión. «Estoy consternado por las noticias del avión de MH estrellado. Hemos iniciado una investigación inmediata», afirmó el primer ministro en su cuenta de Twitter. Inmediatamente, el presidente de EE UU, Barack Obama, ofreció asistencia al Gobierno de Ucrania para «determinar qué pasó y por qué» en el suceso, en el que dijo desconocer por el momento si había compatriotas suyos. «Como país, nuestros pensamientos y oraciones están con todos los pasajeros y sus familiares, donde quiera que estén», indicó en un discurso ofrecido en el Estado de Delaware el presidente, quien no valoró las posibles causas del suceso. Obama aseguró que su Gobierno está en contacto con el ucraniano y ofrecerá «toda la asistencia que pueda para ayudar a determinar qué ocurrió y por qué». El presidente estadounidense fue informado del siniestro por sus asesores y también por su homólogo ruso, Vladimir Putin, quien le dijo que había «informes iniciales de un avión de pasajeros estrellado cerca de la frontera entre Rusia y Ucrania». Según informó el Kremlin en un comunicado, Putin recibió la información sobre la catástrofe antes de hablar telefónicamente con Obama y expresó sus más profundas condolencias al primer ministro malayo, al que pidió que transmitiera su más hondo pesar a los familiares de las víctimas del siniestro.

Por su parte, el presidente francés, François Hollande, pidió en nombre de su país que se haga lo posible para aclarar «las circunstancias» de esta tragedia, cuya noticia recibió el mandatario «con una inmensa emoción», según un comunicado del Elíseo.Hollande precisó que las autoridades francesas «están movilizadas para recopilar todas las informaciones sobre este drama y sobre las nacionalidades de los pasajeros», pues, según el jefe de la diplomacia gala, Laurent Fabius, viajaban «como mínimo» cuatro franceses. También se centró en la «investigación internacional» la jefa de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Catherine Ashton, en su reacción al siniestro. «Las circunstancias deben aclararse sin demora y la investigación internacional debe esclarecer plenamente esta tragedia», afirmó Ashton, quien instó en un comunicado a todas las partes a que den «acceso completo al lugar del accidente, de modo que se pueda asegurar de inmediato, y a que cooperen plenamente y compartan toda la información pertinente».