Inmigración ilegal

La Comisión Judicial del Senado aprueba la reforma migratoria de Obama

La Comisión Judicial del Senado ha aprobado este martes la reforma migratoria presentada por el Gobierno de Barack Obama, el primer paso para que el Congreso dé su visto bueno a una de las principales promesas electorales del presidente estadounidense.

La Comisión Judicial ha respaldado el proyecto de ley con 13 votos

a favor --los de los diez senadores demócratas y los de tres republicanos: Jeff Flake (Arizona), Lindsey Graham (Carolina del Sur)

y Orrin Hatch (Utah)-- y cinco en contra --los del resto de republicanos--.

"La disfunción de nuestro actual sistema migratorio nos afecta a todos, ya hace tiempo que debimos hacer reformas. Espero que nuestra historia y nuestros valores puedan inspirarnos finalmente para tomar medidas", ha dicho el jefe de la Comisión Judicial, Patrick Leahy.

Se espera que el debate de este borrador en el pleno del Senado comience el próximo mes de junio. "El 'sí' de la Comisión Judicial es una contribución sustancial para seguir adelante. Espero que seamos capaces de aprobarla del todo en el Senado", ha dicho el líder de la minoría republicana en la cámara alta, Mitch McConnell, a la CNN.

Obama ha celebrado el visto bueno al proyecto de ley en la Comisión Judicial al considerar que "el fuerte apoyo bipartito que ha recibido es plenamente acorde con los principios de la reforma de sentido común"que ha propuesto para "arreglar un sistema migratorio roto".

"Ninguno de los miembros de la Comisión Judicial ha conseguido todo lo que quería, tampoco yo, pero le debemos al pueblo estadounidense conseguir el mejor resultado posible sobre la línea de meta", ha dicho en un comunicado.

Además, ha instado al pleno del Senado a "poner este proyecto de ley bipartito sobre la mesa lo antes posible", al tiempo que ha expresado su confianza en que "el proceso de reforma se traducirá en más mejoras".

En la Cámara de Representantes, dominada por el Partido Republicano, ni siquiera se ha empezado a analizar la reforma migratoria en las comisiones competentes, lo que retrasará su aprobación definitiva.

De aprobarse, la reforma migratoria del Gobierno Obama será la mayor sobre la materia que se ha llevado a cabo desde 1986. Su piedra angular es la facilitación del acceso a la ciudadanía estadounidense

a los inmigrantes trabajadores.

Obama prometió por primera vez reformar el sistema migratorio de Estados Unidos en la campaña para las elecciones presidenciales de 2008, pero una vez en el cargo no pudo llevarla a cabo por el veto del Congreso. En la campaña electoral de 2012 retomó su promesa y, tras ser reelegido, ha redoblado sus esfuerzos para materializarla.