Unión Europea

La Eurocámara urge a los países a repartirse los refugiados por cuotas

El pleno de la Eurocámara ha aprobado una resolución que urge a la Comisión Europea (CE) a establecer cuotas obligatorias de distribución de refugiados entre los Veintiocho, una propuesta a la que no quisieron comprometerse los países en la última cumbre sobre inmigración.

En una resolución pactada por los dos grandes grupos -populares y socialdemócratas europeos- y aprobada por amplia mayoría, los eurodiputados "llaman a la Comisión a establecer cuotas obligatorias de reparto de demandantes de asilo entre los países miembros".

Esa petición tiene el visto bueno del presidente de la CE, Jean-Claude Juncker, quien en un debate previo al voto lamentó que los líderes europeos no fueran más ambiciosos en la última cumbre dedicada a la inmigración.

"La respuesta del Consejo Europeo fue inmediata pero no suficiente. Fue inferior al nivel de ambición que los líderes europeos deberían haber demostrado", señaló Juncker ante los aplausos de la mayoría de los eurodiputados.

En la resolución, los eurodiputados piden más medidas concretas a los Veintiocho, que en la última cumbre europea solo accedieron a aumentar las ayudas de salvamento.

Asimismo, llaman a los países de la UE a "hacer todo lo posible por cooperar en la tarea de salvar vidas en el mar".

Para hacer frente a esas obligaciones de rescate, piden a los Veintiocho que muestren más solidaridad poniendo sobre la mesa recursos efectivos y suficientes.

En ese sentido, piden para aumentar las contribuciones de la Agencia Europea de Control de Fronteras Exteriores (Frontex) y la Oficina Europea de Apoyo al Asilo (EASO) para contratar a más personal y aumentar su financiación.

Por otro lado, propusieron la posibilidad de que las embajadas y consulados emitan visados humanitarios como medida de urgencia.

Tanto los eurodiputados como el propio Juncker en su intervención previa, se mostraron críticos con el hecho que las autoridades italianas tuvieran que asumir el peso de la operación Mare Nostrum en solitario.

Los eurodiputados demandaron en ese sentido, a petición de los Verdes europeos, una misión Mare Nostrum europea.

El presidente del PE, Martin Schulz, se mostró satisfecho por el amplio apoyo de la resolución (449 votos a favor, 130 en contra y 93 abstenciones), y llamó a implementar las herramientas que ya existen y, especialmente, a "desarrollar una verdadera política de inmigración legal europea", más allá de las nuevas propuestas de mecanismos de solidaridad.

En su declaración ante los eurodiputados Juncker pidió que los Veintiocho aumenten sus ayudas al desarrollo, como estrategia a medio y largo plazo para que las mafias no se aprovechen de los que arriesgan su vida en el mar para intentar alcanzar el continente.

Por otro lado, el líder del Ejecutivo comunitario señaló que deben establecerse fórmulas de inmigración legal.

"Si no les abrimos la puerta entrarán por la ventana", dijo Juncker, una frase que recibió las críticas del líder del propio grupo del Partido Popular Europeo (PPE), Manfred Weber, que le recordó que "uno de cada cinco jóvenes europeos no tiene trabajo".

El debate fue especialmente acalorado entre las filas de eurodiputados italianos -muchos portaban en los escaños la leyenda "Je suis migrant"(yo soy migrante)- y los británicos, pues en ambos países se trata de un tema sensible y están cercanas citas electorales.

El líder del euroescéptico UKIP británico, Nigel Farage, muy crítico con la inmigración incluso de otros países de la UE, ha acusado a los Veintiocho de "querer abrir las fronteras a medio millón de islamistas".

Desde los escaños españoles, durante el debate el eurodiputado Esteban González Pons (PP) destacó que los emigrantes tratan de llegar a Europa empujados por la guerra, el hambre y la persecución religiosa o política.

Demandó a la UE que no repita los errores del pasado y tampoco olvide que hasta hace treinta años "los inmigrantes éramos nosotros".

Por su parte, Iratxe García (PSOE) consideró que la respuesta del Consejo Europeo a la situación en el Mediterráneo ha sido "insuficiente"y abogó por un enfoque integral, que incluya la política de cooperación, la regulación del asilo y la ampliación del mandato de las misiones de rescate. Lara Malvesí/Efe