Política

Dublín

La familia de Jean McConville quiere llevar a La Haya el asesinato del IRA

La familia de la norirlandesa Jean McConville, asesinada por el IRA en 1972, anunció hoy su intención de llevar ante la Justicia internacional este caso no resuelto, por el que fue detenido la pasada semana el presidente del Sinn Féin, Gerry Adams.

Uno de los hijos de la víctima, Michael, efectuó ese anuncio durante un acto de conmemoración celebrado el día en su madre habría cumplido 80 años, y tres después de que Adams fue puesto en libertad después de ser interrogado por la Policía norirlandesa (PSNI).

McConville aseguró que la familia continuará luchando para obtener justicia, pero denunció la existencia de "interferencias políticas", lo que, a su juicio, impide llevar a los tribunales a los responsables de la muerte de su madre.

"Queremos que este caso salga de Irlanda del Norte. Queremos llevarlo a La Haya, queremos que un organismo independiente lo examine", abundó Michael, quien tenía once años cuando el ahora inactivo Ejército Republicano Irlandés (IRA) sacó a la fuerza a su madre de su domicilio en Belfast.

Jean McConville, católica conversa, viuda y madre de diez hijos, fue asesinada por el IRA por espiar para las fuerzas británicas, una acusación que resultó ser falsa, y su cuerpo no fue descubierto hasta 2003, cuatro años después de que la banda reconociese su autoría y diese pistas sobre el paradero.

La detención el pasado miércoles de Adams, quien niega su implicación en ese crimen o su pertenencia al IRA, amenazó con crear una grave crisis en el proceso de paz dado que ese partido advirtió de que retiraría su apoyo a la PSNI si su líder era acusado.

Tras su puesta en libertad, el líder republicano reiteró la lealtad de su formación a la fuerzas del orden y su compromiso con la vía democrática, aunque denunció la existencia de "enemigos"del proceso de paz y de los republicanos en la PSNI.

Para Michael McConville, la presión ejercida por el Sinn Féin ha servido para "interferir políticamente"en el devenir del caso, aunque insistió en que la familia seguirá adelante.

"Sabemos -declaró- que vamos a tardar mucho tiempo en obtener justicia para nuestra madre. El IRA nos ha acorralado en una esquina y vamos a salir de esta luchando".

Michael McConville ya afirmó el pasado jueves que, aunque conoce la identidad de los asesinos, no puede divulgarla porque le matarían, y también acusó a Adams de amenazar a la familia con represalias.

En las últimas semanas ocho personas, entre ellas Adams, han sido interrogadas por el crimen -después de que la PSNI obtuviese nuevos testimonios de antiguos miembros del IRA-, pero hasta ahora solo el exdirigente paramilitar Ivor Bell, de 77 años, ha sido acusado.

Bell, un histórico del IRA en Belfast, está siendo procesado por ayudar y encubrir el asesinato de McConville, así como por pertenencia a banda armada.

Como en el caso de Adams, la PSNI enviará informes a la Fiscalía sobre cuatro mujeres detenidas desde marzo pasado por este mismo asesinato, para que decida si hay pruebas para imputarlas.