«La Guardia Nacional dejó actuar a los paramilitares»

De camino al hospital, Armando Armas relata a LA RAZÓN los detalles de la brutal agresión de la que fue víctima.

El diputado opositor Armando Daniel Armas vio como su día daba un giro de 360º grados en apenas unos minutos. Preparado para conmemorar junto a su partido Voluntad Popular el 260 aniversario del Día de la Independencia, terminó víctima de una brutal agresión de un grupo de 30 o 50 simpatizantes del presidente venezolano, Nicolás Maduro. «Había terminado la intervención del vicepresidente y cuando íbamos a empezar nuestro propio acto propio de celebración del Día de la Independencia irrumpieron repentinamente colectivos chavistas. Eran grupos paramilitares. La Guardia Nacional no hizo nada, había 30 o 50 agentes pero, evidentemente, los dejaron actuar. Había un destacamento entero que no hizo nada», denunció Armas en una conversación telefónica con LA RAZÓN, mientras era trasladado a un centro hospitalario para que fuera atendido por las fuertes contusiones recibidas en la cabeza.

«Tengo varios golpes en la frente y una herida con varios puntos en la cabeza», apunta a este diario. «No puedo decir si llevaban armas de fuego, pero sí ‘‘papas’’–bolas cubiertas de papel aluminio con pólvora y piedras en su interior–, que arrojaban para causar más daño. Además, portaban cócteles molotov y barras de hierro. Nos refugiamos en el Hemiciclo», precisa. «El personal interno nos ayudó a cerrar las puertas, no entraron, pero llegaron a los jardines. Esto ya ha pasado con anterioridad. El pasado martes fuimos asediados de nuevo. En la Asamblea, agredieron a diputados y nos tuvieron secuestrados durante seis horas», recuerda el diputado en alusión al asedio que vivió el Parlamento hace una semana. Pese a la fuerte presión a la que están sometidas las fuerzas de la oposición en Venezuela, el diputado del partido de Leopoldo López sentencia con firmeza: «Hay casi 100 jóvenes que han muerto por esta vaina, unos coñazos (golpes, en el lenguaje coloquial de Venezuela) no son nada. Allá afuera hay 20 y nosotros somos más de 100 diputados aquí. Vamos a defender a Venezuela, para eso fuimos electos. Cueste lo que nos cueste seguiremos, estoy orgulloso de representar al estado Anzoátegui», asevera Armas.

En declaraciones a LA RAZÓN, otro de los diputados agredidos Américo De Grazia explicó a LA RAZÓN cómo habían sucedido los acontecimientos. «Después de la batalla campal volvimos a nuestra actividad parlamentaria con la cabeza sangrando. Hay manchas de sangre en las paredes del palacio. Recibimos primeros auxilios, algunos puntos de sutura y retomamos nuestra actividad. Aprobamos el plebiscito mediante el cual, el próximo 16, preguntaremos al pueblo si quiere o no celebrar la Constituyente», afirma De Grazia. Según este diputado, la situación que viven los opositores (que son mayoría en la Asamblea Nacional) es insostenible y degradante. «Llevamos seis meses sin cobrar, sin luz, sin agua... Es un asedio total. Algunos tenemos escolta privada pero, aún así, fue imposible parar a los cincuenta agresores que ayer entraron en la sede parlamentaria. Era una horda enfurecida», asegura en una conversación teléfonica con este periódico. Por su parte el diputado Francisco Sucre aseguraba a LA RAZÓN que «esta acción es una respuesta fascista que demuestra el modelo que quieren imponer. Sí, llevaban armas de fuego como puede verse en los cristales. Esta es la Venezuela que el 90% de los ciudadanos quiere dejar atrás. A partir de este hito estamos convencidos de que nuestra lucha es la correcta. Y pedimos a la comunidad internacional que actúe, no pueden quedarse de brazos cruzados». En la conversación telefónica, Sucre afirmaba que al cierre de esta edición continuaban asediados porque los motoristas chavistas «siguen rodeando la Asamblea». «Ahí tienen a la Guardia Nacional cambiando de turno sin hacer nada», apostilla el diputado. «Si nos tienen que sacar muertos que no saquen, aquí estamos y defenderemos la Asamblea. Mujeres y hombres, tendrían que haber visto a las diputadas defendiéndose. Si quieren volver, que vuelvan aquí estaremos. Si sobre nuestro cadáver tiene que imponerse la democracia, así será» asegura. Como él, otros diputados opositores explicaron por las redes sociales los minutos de terror vividos en la Asamblea. «Esto es la Venezuela de hoy: un Palacio que representa al pueblo legítimo frente a unos delincuentes que con la complicidad de los militares delinquen y unos diputados que representamos al pueblo, resistiendo. No nos vamos a echar para atrás», dijo el diputado Freddy Guevara.