La oposición siria consensúa en Moscú una postura común ante Al Asad

Representantes de varios grupos de la oposición interna siria abrieron hoy una ronda de consultas en Moscú para consensuar una postura común antes de reunirse el próximo miércoles con la delegación del régimen de Damasco.

Representantes de varios grupos de la oposición interna siria abrieron hoy una ronda de consultas en Moscú para consensuar una postura común antes de reunirse el próximo miércoles con la delegación del régimen de Damasco.

Según pudo saber Efe de fuentes cercanas a las conversaciones, a las dos primeras jornadas de las conversaciones intersirias que arrancaron hoy en la capital rusa no acudirá la delegación del Gobierno sirio, encabezada por el embajador en la ONU, Bachar Jaafari.

"Las consultas se centrarán en temas humanitarios", cruciales para Siria, arrasada por una guerra que se ha cobrado la vida de más de 200.000 personas en cuatro años, y "evitarán aludir a los asuntos conflictivos", dijeron las fuentes a Efe.

Mientras, uno de los opositores sirios que participa en las consultas, Suheir Surmeni, aseguró a la agencia rusa RIA Nóvosti que las partes hablarán "de las bases para poner en marcha un proceso político necesario para la reconciliación nacional y la resolución de la crisis actual".

Se refirió también a la aplicación del Comunicado de Ginebra del 30 de junio de 2012, que establece la creación de un Ejecutivo de transición integrado por miembros del Gobierno y de la oposición.

Para la Coalición Nacional Siria (CNFROS), principal alianza política de la oposición en el exilio, las consultas de Moscú no abren la vía para unas negociaciones encaminadas a una transición política, por lo que esta organización no está en la capital rusa.

El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, lamentó hoy la ausencia de la CNFROS y advirtió en clara alusión a la Coalición de que "cualquier decisión sobre adónde debe dirigirse la sociedad siria debe tomarse sobre la base del consenso de todos los sirios, sin que algunos traten de lograr ventajas unilaterales".

Para quitar hierro a sus propias palabras, de las que se desprende que las consultas no tienen el alcance deseado por sus notables ausencias, el ministro recalcó que Moscú mantiene un estrecho contacto con representantes de la CNFROS en Estambul.

Algunos expertos rusos han acusado a Estados Unidos de dinamitar la solución política al conflicto sirio.

Para Elena Supónina, directora del Instituto Ruso de Investigaciones Estratégicas, la Coalición Nacional Siria "busca cualquier pretexto para boicotear la reunión de Moscú", entre otras cosas "porque sus patrocinadores financieros y políticos son algunos países de la región y de Occidente, con Estados Unidos a la cabeza".

"Dado que los estadounidenses no ofrecen ninguna alternativa a las conversaciones, la gran pregunta es qué quiere Washington. No descarto que en la capital de Estados Unidos todavía manejan un plan para derrocar"al presidente sirio, Bachar Al Asad, apuntó Supónina.

Tampoco acudió a la reunión la Corriente Construyendo el Estado Sirio, otra de las organizaciones políticas más relevantes de la oposición interna, cuyo líder, Louay Husein, no pudo salir de Siria por prohibición expresa de las autoridades de Damasco.

Husein está en libertad bajo fianza, después de haber estado detenido durante tres meses acusado de "difundir noticias falsas que afectan a la moral de la nación y debilitan el sentimiento nacional".

"Si un miembro de nuestro grupo no puede viajar a Moscú, no irá ninguno", apuntó Husein el sábado en conversación telefónica con Efe, en la que también puso en duda que las consultas puedan ofrecer algún resultado ante la ausencia de grupos opositores tan importantes como el suyo o la CNFROS.

Quién sí está en las consultas es el Consejo de Coordinación Nacional (CCN), uno de los grupos más importantes de la oposición política tolerada por el Gobierno de Asad.

Su portavoz, Jalaf Dahud, ha explicado en vísperas de las conversaciones que en éstas se abordarán temas como la situación humanitaria, la liberación de detenidos y el levantamiento del asedio a varias ciudades cercadas.

Siria es escenario desde hace cuatro años de un conflicto armado que se ha cobrado la vida de unas 220.000 personas y ha causado más de cuatro millones de refugiados, según la ONU.

Arturo Escarda/Efe