Política

Bruselas

La UE mantiene la mano tendida a Ucrania, pero rechaza un diálogo a tres con Moscú

Manifestantes posan con la bandera Europea y de Ucrania durante una manifestación frente a la embajada de Ucrania en Varsovia (Polonia).
Manifestantes posan con la bandera Europea y de Ucrania durante una manifestación frente a la embajada de Ucrania en Varsovia (Polonia).larazon

El primer ministro ucraniano, Mikola Azarov, aseguró ayer no haber cerrado todavía ningún acuerdo sobre créditos financieros con Rusia. En todo caso, dijo, su país no quiere convertirse en un "campo de batalla"entre la Unión Europea y Rusia.

Después de la tormenta, dicen que viene la calma. Sin embargo, en el caso de la crisis diplomática abierta con Ucrania después de su negativa a firmar un acuerdo de libre comercio con la Unión Europea tras meses de preparativos, parece que se mantiene la marejada.

La celebración a finales de semana de la cumbre de la Asociación Oriental en Vilna, mantiene la tensión en la esfera política, alentada además por las manifestaciones proeuropeas en las principales ciudades ucranianas.

A la cita asistirán los presidentes de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, y del Consejo, Herman Van Rompuy, así como a la mayor parte de los jefes de Estado y de Gobierno de los Veintiocho, junto al presidente ucraniano, Viktor Yanukovich.

Los 28 ha optado por mantener la mano tendida a Kiev, pese a que ésta no haya dado muestras de intención de retractarse. De hecho, los europeos han rechazado informalmente la idea de poner en marcha un diálogo a tres bandas con Rusia, como ha defendido Moscú.

Aunque para la UE el acuerdo con las repúblicas ex soviéticas no es excluyente de sus relaciones con Moscú, las autoridades rusas han planteado una dinámica de bandos, haciendo revivir una suerte de nueva guerra fría entre oriente y occidente. El Kremlin defiende que aquellos países que se unan a la UE en materia comercial serán excluidos de la Unión Aduanera, donde ya participa Bielorrusia.?

El primer ministro ucraniano, Mikola Azarov, aseguró ayer no haber cerrado todavía ningún acuerdo sobre créditos financieros con Rusia. En todo caso, dijo, su país no quiere convertirse en un "campo de batalla"entre la Unión Europea y Rusia.

La UE ha denunciado las presiones de Rusia contra Kiev, segunda víctima de la estrategia moscovita después de Armenia. Para ello, Moscú ha disminuido sus intercambios comerciales con Ucrania en los últimos meses, situando al gobierno de Yanukovich en una difícil situación económica.

Mientras tanto, la oposición ucraniana continúa por cuarto día consecutivo las movilizaciones en protesta contra la decisión del Gobierno de renunciar al acuerdo con la UE. El presidente de comisión de Exteriores del Parlamento Europeo, Elmar Brok, y el responsable para la política con la Asociación Oriental, Jacek Saryusz-Wolski, expresaron su apoyo a las protestas y advirtieron de que habrá "serias consecuencias"si emplea la fuerza contra las manifestaciones."Estos manifestantes pacíficos están expresando su clara oposición a la decisión de no firmar el Acuerdo de Asociación UE-Ucrania, una decisión que les priva de su futuro europeo", señalaron.