Roma

Los presos fantasma de Maduro

Organizaciones de derechos humanos y familiares exigen una ley de amnistía. El Papa recibirá al presidente el 17 de junio

Erasmo Bolívar, María Lourdes Afiuni y Raúl Isaías Baduel
Erasmo Bolívar, María Lourdes Afiuni y Raúl Isaías Baduellarazon

CARACAS- En Venezuela, aunque la Administración chavista se niega a admitir la existencia de presos políticos, los activistas de derechos humanos denuncian el atropello al sistema procesal en algunos sonados casos. Falta ponerse de acuerdo en la cantidad de detenidos que podrían entrar dentro de esa clasificación.

El caso más conocido es el de la jueza María Lourdes Afiuni, quizás por su condición de magistrada o porque el lingüista y activista norteamericano Noam Chomsky le escribió a Hugo Chávez criticando su detención y pidiendo su liberación. A finales de 2011, tres expertos de la ONU dieron la voz de alarma por la situación de la jueza y pidieron su liberación inmediata. Los funcionarios no respondieron y Afiuni fue violada en la cárcel. La pasada semana, la Fiscalía solicitó su libertad condicional por problemas de salud. La magistrada está acusada de permitir la huida de un enemigo del Gobierno. «Ha quedado muy claro que Afiuni no ha cometido ningún delito y que se ha generado un fraude procesal. Al Gobierno no le interesa que salga esta tramoya durante la privación de libertad de la doctora Afiuni», afirma a LA RAZÓN, José Amalio Graterol, su abogado.

Organizaciones de derechos humanos como Human Rights Watch y Naciones Unidas han criticado la falta de independencia judicial en el país. El propio ex presidente Chávez llegó a decir que «en Venezuela no hay presos políticos. Hay algunos políticos presos, eso es otra cosa». Sin embargo, en noviembre de 2012, con el comandante todavía en vida, las autoridades de Venezuela y representantes de la oposición mantuvieron un encuentro para abordar la posibilidad de una amnistía. El diputado del partido opositor Acción Democrática (AD) Edgar Zambrano, que capitaneó la reunión, se queja de que Maduro no aborde el tema. Existen venezolanos exiliados en países como Costa Rica y en Perú. En esos dos países calculó que residen cerca de 40 venezolanos entre civiles y militares.

Otras organizaciones como Justicia y Proceso Venezuela contabilizan 24 presos políticos mientras que el Foro Penal Venezolano habla de entre 22 y 37. Más allá de la cifra, organizaciones venezolanas de derechos humanos y familiares de detenidos han solicitado en las últimas semanas a Maduro una ley de amnistía. Meses antes de morir, Chávez mostró su disposición a estudiar el proyecto e incluso firmó varios indultos. Fueron liberados Julio Rodríguez y Lázaro Forero, condenados por algunas de las 19 muertes registradas durante el golpe de 2002, y Alejandro Peña Esclusa, imputado en 2008 por ocultamiento de explosivos y asociación para delinquir.

En Navidad también obtuvieron su libertad Henry Vivas, ex director de la Policía metropolitana, que estuvo siete años preso acusado de la muerte de dos manifestantes durante el golpe de Estado del 11 de abril de 2002. Y José Sánchez, conocido como «Mazuco», electo diputado en 2010, quien era secretario de seguridad de la Gobernación del estado Zulia, y fue acusado de ser el autor intelectual de la muerte de un funcionario de la Dirección de Inteligencia Militar.

Gonzalo Himiob, del Foro Penal Venezolano, asegura que «se busca su libertad independientemente de la vía legal» pues a la gran mayoría, dice, le corresponde una medida humanitaria por motivos de salud o una medida alternativa por haber cumplido ya buena parte de la pena. Y agrega: «Son presos políticos o presos del poder, como también los llamamos, porque hay motivación política detrás de esos procesos». Pero la realidad es que líder bolivariano sigue radicalizando su postura para contentar a los «halcones del chavismo», entre ellos al presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello. Además, y mientras el presidente siga influido por Cuba, el cerco judicial contra sus enemigos políticos continuará, convirtiéndose en el sello de la era Maduro.

Por otra parte, el Papa Francisco recibirá el 17 en el Vaticano al presidente Maduro, informa Efe. Será la primera visita a la Sede Apostólica del presidente venezolano, cuyo antecesor, Hugo Chávez, viajó en tres ocasiones a Roma para reunirse con Juan Pablo II (1999) y Benedicto XVI (2006).

presos políticos convertidos en políticos presos

Marco Hurtado, Héctor Rovaín, José Pérez, Julio Molina y Erasmo Bolívar son los considerados «presos políticos» que más tiempo llevan retenidos: los cinco están en la cárcel militar de Ramo Verde desde el 21 de abril de 2003. Se les acusa de la muerte de dos de las 19 personas que fallecieron el 11 de abril de 2002 y recibieron condenas de entre 16 y 30 años de prisión. No se presentó ni una sola prueba de que estuvieran directamente involucrados en esas muertes.

La jueza María Lourdes Afiuni continúa detenida desde hace 26 meses. Su causa se remonta al 10 de diciembre de 2009, cuando se efectuó una audiencia en el caso contra Eligio Cedeño, un banquero que entonces llevaba tres años preso sin condena por evadir controles de divisas. La jueza le concedió la libertad bajo fianza. Esa misma noche, Cedeño huyó a Estados Unidos y Afiuni fue detenida por funcionarios de la extinta Dirección General de los Servicios de Inteligencia.

Raúl Isaías Baduel, militar y político venezolano. En 2002, encabezó la operación cívico-militar que restituyó en el poder a Hugo Chávez durante el golpe de Estado en Venezuela de 2002. Fue comandante general del Ejército venezolano desde enero de 2004 hasta julio de 2006, y ministro de Defensa de junio de 2006 hasta julio de 2007. Cuando terminó su gestión, se volvió un feroz crítico del Gobierno de Chávez. Desde 2009 se encuentra recluido en prisión, cumpliendo una condena de casi ocho años por enriquecimiento ilícito.