Política

Ginebra

Los prorrusos mantienen sus posiciones y rechazan el desarme

Los manifestantes y activistas separatistas prorrusos armados mantienen este viernes el control de los edificios gubernamentales ocupados en el este de Ucrania, con el argumento de que necesitan más garantías antes de cumplir el acuerdo firmado la víspera en Ginebra entre Ucrania, Rusia, Estados Unidos y la Unión Europea.

El pacto ofrece la que es la mayor esperanza hasta el momento para desactivar un enfrentamiento en Ucrania que ha deteriorado las relaciones entre Occidente y Rusia, hasta llevarlas a su peor nivel desde la Guerra Fría.

Sin embargo, el cumplimiento del acuerdo parece difícil sobre el terreno debido a la gran desconfianza entre los grupos prorrusos y el Gobierno de Kiev, respaldado por Occidente, en una semana en la que la violencia ha dejado varios muertos.

El hecho de que se alcanzara un acuerdo este jueves ha sido una sorpresa y no está claro qué ha ocurrido para persuadir al Kremlin, que hasta hace poco había mostrado pocas señales de compromiso, para unirse al llamamiento de desarme de las milicias.

Así, Denis Pushilin, el jefe de la autoproclamada 'República Popular de Donetsk', en el este de Ucrania, ha asegurado este viernes que sus hombres no cumplirán el acuerdo ratificado la víspera en las conversaciones de Ginebra por Ucrania, Rusia, Unión Europea y Estados Unidos, y "perseverarán"en su lucha por la autonomía de la región.

El pacto cerrado el jueves en Ginebra establece que los grupos armados prorrusos se desarmarán y pondrán fin a la ocupación ilegal de edificios gubernamentales en el este de Ucrania y deja a la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europea (OSCE) la supervisión del cumplimiento del acuerdo.

Pushilin ha dejado claro que el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, "no ha firmado nada"en representación de los habitantes de Donetsk sino en nombre de Rusia, por lo que el acuerdo no les afecta.

En esta misma línea, el jefe de la autoproclamada 'República Popular de Donetsk' ha subrayado que sus hombres sólo abandonarán los edificios gubernamentales ocupados cuando el Gobierno de Kiev haga exactamente lo mismo. Además, ha afirmado que sus hombres continúan con los preparativos para celebrar el 11 de mayo un referéndum para dar mayor autonomía a esta región del oriente de Ucrania.

En Slaviansk, una ciudad que se ha convertido en el centro de la crisis después de que unos hombres con fusiles de asalto 'kalashnikov' tomaron el control de varios edificios el pasado fin de semana, los líderes prorrusos se reúnen este viernes dentro de los edificios ocupados para decidir cómo responder al acuerdo de Ginebra.

En la calle se han percibido, por el momento, pocos cambios. Frente al ayuntamiento de Slaviansk, sigue habiendo hombres armados apostados sobre sacos terreros. Los separatistas mantienen el control de las principales calles y registran los coches que circulan en puestos de control colocados en varios puntos de la ciudad.

"¿Vamos a abandonar los edificios para que vengan y nos detengan?. No lo creo", ha afirmado un guardia que ha se ha identificado como Alexei y que está situado en una carretera frente a otros de los edificios ocupados. No obstante, ha reconocido que las negociaciones han cambiado la situación.

"Resulta que Vova no nos quiere tanto como pensábamos", ha afirmado Alexei, empleando un diminutivo para Vladimir Putin, el presidente ruso que muchos en la milicia separatista ven como su principal protector.

Mientras tanto, en Kiev, los manifestantes de la plaza de la Indepedencia (Maidán), han dejado claro que las barricadas no se quitarán hasta que se celebren las elecciones del 25 de mayo. Los milicianos separatistas prorrusos controlan todavía varios edificios gubernamentales en diez ciudades del este de Ucrania.

Los separatistas que ocupan un edificio estatal de Donetsk han afirmado que no lo abandonarán hasta que los seguidores del nuevo Gobierno desmonten su campamento en la plaza de Maidán.