Bruselas

Los sindicatos amenazan a Renzi con una huelga general si desoye a los trabajadores

Los principales sindicatos italianos advirtieron hoy al Gobierno de Matteo Renzi que si desoye las reivindicaciones de los empleados de la Administración Pública llamarán a la huelga "no solo del sector, sino de todos los trabajadores". "Sepa el Gobierno que si no da respuestas llevaremos a cabo una huelga a la que llamaremos a todos los trabajadores, no solo a los del sector (público)", dijo la líder del sindicato mayoritario, la Cgil, Susanna Camusso.

Asimismo pidió que el Ejecutivo que lidera el exalcalde de Florencia deje de tratar a la Administración "como si no fuera el centro"e instó al cese de las promesas y de los anuncios para pasar de una vez por todas a los hechos.

Las palabras de Camusso, titular de la Confederación General italiana de los Trabajadores, se produjeron en el acto de clausura de la manifestación que recorrió este sábado las calles de la capital italiana con el objetivo de defender el empleo público en el país transalpino.

Bajo el lema "Servicios porque sirven, públicos porque son de todos", los principales sindicatos del país -Cgil, Cisl y Uil- llevaron a cabo una anunciada manifestación a la que, según sus cifras, se adhirieron más de 100.000 personas procedentes de todo el país, el doble de lo esperado.

Esta jornada de protesta contó con la participación de funcionarios de la Educación, de la Sanidad, de funciones centrales, de los servicios sociales, de la Seguridad y Emergencias y de la Universidad, además de numerosos estudiantes y jubilados.

Siete son las peticiones lanzadas desde el palco por estos sindicatos, si bien las que cobraron hoy relevancia fueron las de retomar la contratación en el sector público y descongelar los salarios de los funcionarios.

El bloqueo en los aumentos salariales de empleados públicos de Italia se dictaminó en 2010, en el ocaso del último Gobierno de Silvio Berlusconi y bajo las directrices del que fuera su ministro de Administación Pública e Innovación, Renato Brunetta.

Esta medida ha provocado pérdidas cuantificadas en cerca de 5.000 euros a los más de tres millones de trabajadores afectados por la misma.

Por esta razón, los sindicatos aspiran a que el Gobierno incluya en los Presupuestos Generales para el 2015 los fondos necesarios para llevar a cabo ese desbloqueo y reanudar la contratación en la Administración Pública.

Una petición de difícil cumplimiento a tenor de las directrices marcadas desde Bruselas en relación con el gasto público y máxime teniendo en cuenta que este documento se encuentra en fase de análisis por parte de la Comisión Europea.

Por esta razón, la prensa italiana vaticina que la amenaza de los sindicatos, la huelga, puede cumplirse en torno al próximo mes de diciembre.

Además reivindicaron mayor estabilidad laboral para los funcionarios, limitar la participación de empresas privadas en el sector, la valorización de la instrucción, la estandarización de los costes y servicios de la Universidad y la implementación de un sistema de seguridad pública más avanzado.

El secretario general adjunto de la Unión italiana del Trabajo (UIL), Carmelo Barbagallo, lamentó que el Gobierno es "el peor contratante del país"y amenazó ante una plaza copada de personas que, "si no se sienta para renovar el contrato (público), haremos la huelga general en la Administración Pública".

Por su parte, Annamaria Furlan, líder de la Confederación italiana del Sindicato de Trabajadores (Cisl) animó a sus colegas a "continuar con todos los instrumentos de lucha"con los que cuentan los interlocutores sociales.

"Hasta hoy, el Gobierno ha sido sordo, esperemos que esta plaza le haya desatascado las orejas porque nosotros continuamos con todos los instrumentos de lucha con los que cuenta el sindicato confederal", recordó.

Ante esta movilización, la ministra para la Administración Pública, Marianna Madia, ha asegurado recientemente que considera "justo descongelar la contratación en el sector público"pero que, en épocas de crisis, el objetivo es encontrar recursos para destinarlos a quienes "ganan menos".

Sea como fuere y ante la amenaza de una huelga fraguada en su ministerio, Madia ha referido en los últimos días que "escuchará las razones"de los agentes sociales.

Por otro lado, los sindicatos critican que Renzi no haya tenido en cuenta a los trabajadores públicos durante la redacción del proyecto de ley de la reforma de la Administración Pública, que se encuentra en fase de lectura parlamentaria.

Este proyecto incluye medidas destinadas a propiciar un relevo generacional entre los trabajadores, a reducir el gasto del Estado, a combatir la corrupción el seno de la Administración y a facilitar los trámites burocráticos.