Francia

Macron, en guerra contra las «fake news»

El presidente francés anuncia una ley contra la difusión de noticias falsas en internet durante los procesos electorales. Él mismo fue víctima de esta desinformación durante la campaña

Emmanuel Macron durante su discurso de Año Nuevo en el Palacio del Eliseo
Emmanuel Macron durante su discurso de Año Nuevo en el Palacio del Eliseolarazon

El presidente francés anuncia una ley contra la difusión de noticias falsas en internet durante los procesos electorales. Él mismo fue víctima de esta desinformación durante la campaña.

Corrían las semanas previas a la elección presidencial francesa de la primavera pasada. Emmnauel Macron, que despuntaba en las encuestas, era acusado en páginas rusófilas de favorecer a asociaciones islamistas o de mantener una doble vida homosexual con el joven presidente de la radio pública francesa. Los ataques se multiplicaron en los días previos a la segunda vuelta por webs que pretendían favorecer a la ultraderechista Marine Le Pen. Era entonces cuando el aún candidato sufría en sus propias carnes la expansión de noticias falsas, algo que, a posteriori, los franceses no tuvieron problema en identificar. Pero pese a su residual impacto en Francia, seis meses después y como si de un ajuste de cuentas se tratara, Macron quiere iniciar en este 2018 un verdadero combate contra las «fake news» que, repetidamente, aparecen en escenarios electorales en los países occidentales.

Aprovechando el tradicional discurso presidencial frente a la prensa de principios de año, el mandatario galo anunció una ley que permitirá ejercer un mayor control sobre internet durante los periodos electorales que haga frente a la piratería informática. Macron no quiso dar detalles concretos ni fecha precisa para la presentación del proyecto de ley, pero subrayó que se trata de «hacer evolucionar la legislación para proteger la vida democrática de las falsas noticias».

En periodo electoral, en las plataformas de internet, los contenidos «ya no tendrán las mismas reglas», advirtió en declaraciones a todos los medios presentes ayer durante su discurso del Elíseo. En este sentido, señaló que las páginas web, en aras de la «transparencia», deberán hacer público quién está detrás de los contenidos patrocinados, así como «limitar» este tipo de formatos. «No valen todas las palabras», sentenció, invitando a los propios periodistas a que se sumen a las reflexiones previas al proyecto.

De esta forma, el Gobierno galo pretende que si se confirma la propagación de una noticia falsa, la Justicia tenga la capacidad necesaria para censurar no sólo el contenido, sino también la página que le dé cobijo, que podría incluso acabar cerrada. Además, se pretende empoderar a instituciones públicas como el Consejo Superior Audiovisual para que señalen cualquier tipo de «desestabilización por parte de medios controlados o influenciados por otros Estados».

En cuanto a la incorporación de otras iniciativas, el presidente valoró positivamente la intención de la organización Reporteros sin Fronteras de elaborar una especie de certificado de calidad de los medios y órganos de prensa que respeten la deontología del oficio. Tras su elección, Macron apuntó abiertamente a medios oficiales rusos, como la cadena de televisión Rusia Today o a la agencia oficial Sputnik, de difundir informaciones falsas sobre él durante la campaña.

El presidente francés anunció además una ley para el audiovisual público francés que estará lista a finales de 2018 y que pretende dinamizar sus contenidos con las nuevas formas de consumo. Fuentes próximas a la mayoría parlamentaria de En Marche han señalado a LA RAZÓN que el objetivo del Ejecutivo estará basado en el modelo de la cadena británica BBC, algo que, sin embargo, no sería del agrado de los dirigentes de France Télévisions y Radio France.