Disturbios

Macron promete ayuda urgente tras una semana de disturbios

Los alcaldes franceses recuperarán el poder para designar las viviendas sociales

Paris (France), 04/07/2023.- France's President Emmanuel Macron addresses mayors of cities affected by the violent clashes that erupted after a teen was shot dead by police last week during a meeting at the presidential Elysee Palace in Paris, France, 04 July 2023. (Francia) EFE/EPA/LUDOVIC MARIN / POOL MAXPPP OUT
Emmanuel Macron recibe a 220 alcaldes en el ElíseoLUDOVIC MARIN / POOLAgencia EFE

Tras una semana de altercados y descontrol, el orden comienza a restablecerse en Francia aunque el Gobierno no da por concluida la crisis y las medidas y el despliegue de seguridad irán adaptándose a una menor incidencia de la violencia progresivamente. En esta semana de caos en Francia, las fuerzas del orden han detenido en total a 3.915 personas, según el Ministerio de Justicia, un tercio de ellas menores de edad. El balance de destrozos es considerable: un millar de edificios han sufrido incendios o desperfectos, han ardido montones de basura y contenedores y más de 5.000 vehículos, además de unos 300 ataques a comisarías y cuarteles de la gendarmería. Durante esta tarde, Emmanuel Macron recibió en el Elíseo a los alcaldes de las 220 poblaciones del país que han sufrido los altercados. El mandatario francés anunció una ley urgente para acelerar las reparaciones de los daños causados. «Vamos a presentar una ley de emergencia para aplastar todos los retrasos, tener un procedimiento acelerado para reconstruir mucho más rápido», dijo el jefe de Estado en la reunión con los alcaldes. Macron también prometió apoyo a las autoridades locales «para poder reparar muy rápidamente» los equipos de videovigilancia averiados, así como ayuda financiera a las ciudades para reparar «carreteras, establecimientos comunales y escuelas».

Pero más allá de la reconstrucción, Macron quería pulsar la opinión de los responsables municipales sobre el problema de fondo de esta crisis, ese polvorín en el que se han convertido desde hace muchos años los empobrecidos extrarradios multiculturales, «banlieue». Y el diagnóstico y la solución son una cuestión de permanente debate en Francia. Macron ha reconocido que no había «unanimidad en la sala» sobre las soluciones tras la muerte de Nahel. A menudo criticado por haber enterrado en 2018 el plan del exministro Jean-Louis Borloo para los suburbios, el presidente reconoicó que había sido «torpe» pese a las iniciativas que ha activado para impulsar la política urbana.

Macron prometió trabajar durante el verano «para llegar a soluciones muy concretas», mencionando un «informe de situación» con los alcaldes «al final del verano». Entre los proyectos previstos, el de un mejor apoyo, una mayor responsabilidad y a veces mejores sanciones para los padres de los niños que cometen actos violentos. También ha pedido un cambio de método en la construcción de políticas públicas y una «clarificación de responsabilidades» en materia de vivienda. Según el testimonio de algunos de los presentes, como la alcaldesa socialista de Fleury-les-Aubrais, Carole Cannette, Macron ha propuesto volver a situar a los alcaldes en el centro de las decisiones sobre la asignación de viviendas sociales en sus ciudades.