Tensión

Maduro ordena explotar «de inmediato» el petróleo, el gas y las minas en el Esequibo de Guyana

El presidente guyanés responde apelando al derecho internacional y solicitando ayuda a Estados Unidos y Brasil

Nicolás Maduro ha dado el siguiente paso en la disputa territorial con la vecina Guyana tras el polémico referéndum no vinculante del pasado domingo que reclamaba la soberanía de la región de Esequibo, sobre la que Caracas perdió el control en 1899. El presidente de Venezuela ordenó el martes a las empresas estatales del país que pusieran en marcha «de inmediato» la exploración y explotación del petróleo, gas y minas en esta región y dijo que procedería a «otorgar licencias de operación» en ese territorio de casi 160.000 kilómetros cuadrados, para lo cual creará filiales de empresas públicas como la petrolera PDVSA y el conglomerado minero Corporación Venezolana de Guayana.

La orden significa despojar a Guyana de dos terceras partes de su geografía. En un acto en el que estuvo rodeado de gobernadores, alcaldes, ministros, diplomáticos y otros funcionarios, Maduro propuso establecer una norma que prohíba la contratación de empresas que operen o colaboren en las concesiones dadas por Guyana en el mar que Venezuela considera «pendiente por delimitar». Pero no estimó el tiempo que tardará en concretarse la primera concesión en el Esequibo, ya incorporado en el mapa nacional después de que los electores refrendaran en las urnas los planes del chavismo en una votación poco concurrida. El Consejo Nacional Electoral (CNE) informó de una participación de 10.431.907 personas, unos datos que contrasta con la afluencia a los centros de votación.

El Ministerio Público y el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela respaldaron el lunes el referéndum de cinco preguntas. En un comunicado, la Fiscalía aseguró que se trató de «una gran victoria de la unidad nacional, en la que no hay vencedores ni vencidos, sino un extraordinario triunfo de Venezuela frente a las pretensiones altaneras y violatorias del Derecho internacional del Gobierno» guyanés. «En momentos en que el pueblo palestino está siendo masacrado por el sionismo internacional, y cuando crecen las tensiones por el control de los recursos energéticos del mundo», Venezuela ha realizado «un evento electoral que llama a la solución pacífica de la controversia territorial», recoge el escrito.

La controversia por este territorio data del siglo XIX, pero desde 2018 ha cobrado vigor en vista de la admisión del caso por parte de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), que ha pedido a Venezuela no completar acciones que alteren la dinámica actual sobre el área, administrada por Guyana. Sin embargo, Maduro rechaza la mediación de la CIJ en este asunto, un alegato que también se vio reforzado con el referendo, en el que los venezolanos acordaron no reconocer la jurisdicción del tribunal internacional que, de cualquier modo, emitirá una decisión vinculante para las dos naciones en los meses por venir.

La disputa diplomática por la región del Esequibo se ha recrudecido a lo largo de los años, pero se intensificó en 2015 después de que ExxonMobil anunciara que había encontrado grandes cantidades de petróleo frente a sus costas. Venezuela insiste en que la región le pertenece porque estuvo dentro de sus fronteras durante el periodo colonial español.

Guyana responde

El presidente de Guyana, Irfaan Ali, ha declarado este miércoles que su país está tomando todas las medidas necesarias para protegerse de una posible incursión militar de Venezuela. El mandatario ha explicado en una entrevista con Associated Press que su Gobierno está contactando con aliados y socios regionales, con algunos de los cuales Guyana tiene acuerdos de defensa, para proteger su integridad territorial. Ha hablado con Estados Unidos, el vecino Brasil, Reino Unido, Francia, el secretario general de la ONU y el Comando Sur de Estados Unidos, que supervisa las operaciones militares en América Central, América del Sur y el Caribe.

«Si Venezuela procede a actuar de esta manera imprudente y aventurera, la región tendrá que responder. Y eso es lo que estamos construyendo. Estamos construyendo una respuesta regional», ha señalado Ali, que subraya que «los anuncios de Venezuela desafían totalmente el derecho internacional».