Reino Unido

Major y Blair alertan de que el «Brexit» amenaza la unidad nacional

John Major y Tony Blair atraviesan el Puente de la Paz en Derry (Ulster)
John Major y Tony Blair atraviesan el Puente de la Paz en Derry (Ulster)larazon

El ex primer ministro conservador John Major y su sucesor en el cargo, el laborista Tony Blair, aparcaron ayer sus diferencias políticas para abogar por la permanencia de Reino Unido en la Unión Europea. A menos de dos semanas para que tenga lugar el plesbiscito, las encuestas dan un empate técnico a euroescépticos y eurófilos. El temido «Brexit» se perfila como una posibilidad más real, por lo que, al igual que pasó en el referéndum escocés, políticos de diferentes ideologías se han visto obligados a unir fuerzas para pedir a los británicos que no abandonen el «club» europeo.

Los que en su día fueron inquilinos de Downing Street pronunciaron un discurso ante un grupo de estudiantes en la localidad de Derry, en el que aseguraron que la ruptura de Londres con Bruselas afectaría a la estabilidad de Irlanda del Norte y podría, en el futuro, provocar la ruptura del propio Reino Unido. Su mensaje cobra especial significado en la región, donde el mayoritario y unionista Partido Democrático Unionista (DUP) está haciendo campaña a favor de la salida de Reino Unido de la UE.

La semana pasada, el ministro del Tesoro, George Osborne, ya se desplazó hasta Belfast para advertir de los riesgos económicos en caso de divorcio y ayer Major y Blair, que desempeñaron además un papel clave durante sus respectivos mandatos en la resolución del conflicto armado norirlandés con la firma del Acuerdo del Viernes Santo (1998), alertaron sobre los riesgos que podría desencadenar un «Brexit» en la provincia. «Creo que sería un error terrible tomar una decisión que plantearía el riesgo de desestabilizar el complicado y sofisticado arreglo constitucional que sustenta la estabilidad en Irlanda del Norte», dijo el ex líder «tory».

«La victoria del ‘no’ a la permanencia sería un error de proporciones históricas que también pondría en peligro la unidad territorial de todo el país», recalcó. En este sentido, Major señaló que el «Brexit» llevaría a Escocia a reclamar la convocatoria de otro referéndum de independencia y, a diferencia del celebrado en 2014, la mayoría de su electorado podría optar entonces por la secesión. «La unión más exitosa en la historia mundial se rompería para siempre», subrayó.

Por su parte, Blair insistió en que la estabilidad en el Ulster descansa sobre unos «cimientos cuidadosamente construidos» durante las últimas décadas. En su opinión, los partidarios de la salida de Reino Unido de la UE tienen «una fijación ideológica» sobre este asunto y anteponen sus intereses a los de la mayoría, al tiempo, dijo, que ignoran las consecuencias del «Brexit». «Yo os digo que no hagáis caso a esa gente. No permitáis que tomen riesgos con el futuro de Irlanda del Norte. No les dejéis que socaven a Reino Unido», recalcó.