Merkel, la única líder de la UE que sobrevive a la crisis

Angela Merkel ha sido la única jefa de Gobierno en Europa que ha sobrevivido al examen de las urnas en medio de la crisis económica y de la deuda que vive la UE. La dirigente alemana no sólo mantiene el puesto –ocupará la jefatura de Gobierno durante doce años–, sino que además ha cosechado un mayor apoyo al conseguido en las dos elecciones anteriores en las que ganó la Cancillería. Los gobiernos de Zapatero, Sarkozy, Berlusconi, Papandreu o Socrates son algunos de los que han caído en los últimos años. La mayoría perdieron en las urnas, pero también están los casos de Italia y de Grecia, donde, sin pasar por las urnas, se nombró a sendos tecnócratas al frente del Ejecutivo para lidiar con las tempestades políticas y económicas que azotaban ambos países.

La crisis también se ha llevado por delante los gobiernos de Dinamarca, Reino Unido, Finlandia, Hungría, Eslovaquia, Bélgica, Rumania y Holanda. En muchos de estos países, los recortes sociales pasaron factura a sus respectivos líderes. En Alemania, los años duros se vivieron con el anterior canciller, Gerhard Schröder, que alentó importantes reformas y recortes en el Estado de Bienestar en medio de la crisis económica que sufría Alemania. Todo ello le pasó factura en 2005 con una sonora derrota ante Merkel. Para muchos analistas, el socialdemócrata Schröeder hizo el trabajo sucio a su sucesora, la actual canciller, al poner los cimientos del renacimiento económico alemán.

El electorado germano no ha premiado a una figura de un carisma arrollador sino a una dirigente que ha sabido mantener al país al margen de las turbulencias económicas que sufre la mayoría de los países de su entorno europeo. Merkel es también la dirigente que infunde más confianza entre los alemanes y tiene imagen de buena gestora, según se deriva de los estudios de opinión. Una encuesta del Pew Research Center la sitúa como la jefa de Gobierno europeo mejor valorada por su gestión económica ante la crisis, superando a David Cameron y Françoise Hollande. También conviene resaltar que el candidato del SPD en estas elecciones, Peer Steinbrück, no ha logrado despertar un gran entusiasmo entre los votantes alemanes, ni tan siquiera entre los simpatizantes socialdemócratas.