Oriente Próximo

Netanyahu busca el apoyo de EEUU en la recta final de la ofensiva de Gaza

El ministro de Defensa viaja a Washington para desbloquear el envío de armas y presentar a su aliado la operación contra Hizbulá

Galant, en declaraciones antes de volar a Estados Unidos
Galant, en declaraciones antes de volar a Estados UnidosMinisterio de Defensa de Israel

El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, ha viajado a Estados Unidos para una visita relámpago cuyo objetivo ha sido, según declaró, mantener conversaciones con altos cargos de la administración de Joe Biden «fundamentales para el futuro de la guerra». Los analistas israelíes lo traducen en que la misión primordial del viaje ha sido conseguir que Washington descongele un envío de bombas pesadas que ha retenido.

«Estamos preparados para cualquier acción que pueda ser necesaria en Gaza, El Líbano y otras áreas», afirmó Gallant antes de subirse al avión. El otro asunto primordial de la visita ha sido, según adelantó Gallant, abordar un «asunto de gran importancia» de la transición a la «fase 3» de la guerra, refiriéndose a la última fase de la contienda que tiene que ver con la Gaza de postguerra, con el porvenir de la franja y un nuevo estatus político del enclave.

«Discutiré esta transición con funcionarios estadounidenses, abordaré cómo podemos permitir que [sucedan] cosas adicionales y sé que lograremos una estrecha cooperación con EEUU también en este tema», adelantó antes de su vuelo. El viaje incluía reuniones al más alto nivel con el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken; el secretario de Defensa, Lloyd Austin; el director de la CIA, William Burns,;y el enviado especial, Amos Hochstein.

Otro de los asuntos de la reunión entre ambos países es, según el ministro, hablar sobre «las áreas de cooperación entre los establecimientos de defensa de EEUU e Israel, con énfasis en los esfuerzos de acumulación de fuerzas y la proyección de poder, manteniendo al mismo tiempo la ventaja cualitativa de Israel en la región», detalló el enviado del primer ministro, Benjamín Netanyahu.

Israel ha presentado también al Ejército estadounidense sus planes para una posible gran ofensiva contra Hizbulá en El Líbano, así como los resultados de la operación en curso en Rafah, Gaza, que se espera que termine en las próximas semanas y pasar a una fase de redadas selectivas. Asimismo, la visita pretendía abordar el programa nuclear de Irán, que, según el organismo de control de la ONU, ha seguido expandiéndose durante la guerra de Israel contra sus proxis, Hizbulá y los hutíes.

El viaje se produce en medio de una disputa pública entre la administración Biden y Benjamín Netanyahu, quien el martes emitió una declaración en video atacando a EEUU por su «inconcebible» pausa en el envío de munición, afirmando que también se han retenido otros envíos armamentísticos.

Desde entonces, la Casa Blanca ha dicho en varias ocasiones que «no tiene idea» de a qué se refería Netanyahu además de señalar que el único envío retenido es el de munición pesada de hace dos meses. Algunos analistas han especulado con que el vídeo de Netanyahu tiene como objetivo garantizar que el propio primer ministro reciba el crédito si Biden acepta seguir adelante con la transferencia de munición tras la visita de Gallant.

Sin embargo, el sitio de noticias Ynet citó a una fuente de defensa israelí que habló en condición de anonimato diciendo que Israel había estado «muy cerca» de llegar a un acuerdo con EEUU sobre el asunto, pero que las conversaciones se detuvieron cuando Netanyahu emitió ese video. También analistas del canal 12 opinaban que era poco probable ahora que la administración Biden cediera en el asunto, precisamente porque el desacuerdo se ha hecho demasiado público.

Al comienzo de la reunión semanal del gabinete de gobierno, el mandatario israelí defendió este domingo su decisión de publicar la semana pasada el video en el que criticaba a EEUU en inglés por retener envíos de armas. Dijo que lo había hecho público después de que fracasaran intentos «silenciosos» de resolver el problema. Después de enfatizar su agradecimiento por el apoyo del presidente estadounidense durante la guerra, Netanyahu alegó que hace cuatro meses ha habido una «caída dramática» en el suministro de armas a Israel.

«Durante muchas semanas hemos hecho un llamamiento a nuestros amigos estadounidenses para que aceleraran los envíos. Lo hicimos una y otra vez. Lo hicimos en los niveles superiores y en todos los niveles, y quiero enfatizar: lo hicimos en habitaciones privadas. Recibimos todo tipo de explicaciones, pero no recibimos nada. La situación básica no cambió», declaró Netanyahu. «Algunos envíos llegaron por cuentagotas, pero la mayor parte del armamento quedó atrás», añadió.

La acusación de Netanyahu contrasta con la versión difundida por la Casa Blanca, que insiste en que hay un retraso en un tipo de bomba pesada por su uso potencial en áreas urbanas, mientras que todo lo demás fluye como de costumbre. «Después de meses sin cambios en la situación, decidí expresarlo públicamente», expresó Netanyahu.