Terrorismo

Nueva estrategia rusa: reclutar a menores de edad para cometer atentados bomba en Ucrania

La inteligencia ucraniana ha detenido a siete agentes, tres de ellos adolescentes, incorporados a través de redes sociales

Ucrania detiene a siete agentes rusos por intento de atentado
Ucrania detiene a siete agentes rusos por intento de atentadoSBU (Telegram)

El servicio de inteligencia ucraniano, el SBU, ha compartido este martes información acerca de la detención de siete agentes rusos en su territorio, entre ellos tres menores de edad. Les acusan de preparar ataques terroristas que tenían como objetivo atentar contra la vida y la integridad de distintos militares y agentes de la ley de Ucrania.

Aunque Rusia ha utilizado el reclutamiento de ciudadanos ucranianos para cometer actos terroristas desde el comienzo de la invasión del territorio en febrero de 2022, durante los últimos meses los casos se han multiplicado. Así, Moscú utiliza estrategias militares no solo desde el exterior, sino también dentro de la ciudadanía ucrania, a la que recluta a cambio de compensaciones económicas para que cometan traición.

Desde el SBU afirmaban este martes haber impedido una nueva serie de atentados en Ucrania, gracias a un plan de acciones preventivas en las que se detuvo a siete agentes del FSB (Servicio Federal de Seguridad), el servicio de inteligencia y espionaje ruso. Para llevar a cabo los asesinatos contra los miembros de las fuerzas de seguridad ucranianas, estaban fabricando artefactos explosivos improvisados (AEI).

Material explosivo de fabricación casera
Material explosivo de fabricación caseraSBU (Telegram)

Tal y como informaba la inteligencia ucraniana, las personas detenidas habían sido reclutadas por las fuerzas del país ocupante a través de canales de Telegram dedicados a las "ganancias fáciles". Lo más llamativo en esta nueva oleada de detenciones es que tres de los agentes eran menores de edad, varios de ellos estudiantes de secundaria.

Siete detenciones en distintos puntos del país, varios de ellos menores de edad

En la ciudad de Dnipro (una de las más pobladas de Ucrania), agentes del SBU encargados de la contrainteligencia lograron exponer a dos compañeros de clase del municipio de Kamianka. Los chicos, ambos de de 14 años de edad, trataron de hacer volar por los aires a los miembros de una patrulla de la Policía Nacional ucraniana.

Los servicios especiales rusos les ordenaron viajar hasta la capital regional para recoger un explosivo que se encontraba oculto en un escondite y después colocarlo bajo un coche de las fuerzas del orden que se estaba estacionado. La inteligencia ucraniana pudo detener a los menores cuando se disponían a activar el aparato explosivo por control remoto, por lo que no hubo bajas.

Por otra parte, se informó también de la detención de tres agentes enemigos en la ciudad de Krivói Rog (también perteneciente al óblast de Dnipropetrovsk). El mayor de ellos es una persona drogodependiente de unos 30 años de edad que ya había sido arrestada anteriormente por robos. Tras ser reclutado por la inteligencia rusa, el hombre fabricó un artefacto explosivo improvisado para esconderlo en la ciudad.

Los otros dos arrestados fueron vistos sacando los detonantes ocultos y colocándolos en un garaje con el objetivo de acabar con la vida de un soldado ucraniano. Según compartía el SBU, se trata de dos jóvenes de 18 años naturales de la localidad.

También en la región de Chernígov se impidió un ataque terrorista, en esta ocasión frustrado gracias a un adolescente de 17 años. El joven denunció que el FSB había intentado reclutarlo y volar un puente con explosivos, de lo que informó a la inteligencia ucraniana para impedir la ejecución del atentado.

El último de los detenidos fue detenido en la región de Jmelnitski, al oeste de Ucrania. Un hombre de 25 con problemas de drogadicción, que había sido reclutado en la región de Kiev, se desplazó hasta Kamianets-Podilski para cometer un atentado terrorista. Los agentes del SBU aseguran que el joven fue detenido cerca de un edificio de apartamentos. Fue pillado "in fraganti" cuando colocaba el explosivo bajo la rueda del vehículo militar de las Fuerzas Armadas de Ucrania.

Desde el SBU han informado que los delincuentes se encuentran bajo custodia y que se enfrentan a una pena de entre 12 años de prisión y cadena perpetua con confiscación de bienes, según el Código Penal del país. Se les acusa de los cargos de 'traición a la patria cometida en condiciones de estado de guerra' y de 'acto terrorista'.