La visita de Obama a Macri relanza las relaciones entre Argentina y EE UU

«Estamos listos para trabajar con Argentina», promete el presidente de EE UU tras aterrizar en Buenos Aires. Un espaldarazo que ansiaba Macri para garantizar un «nuevo horizonte» al país.

«Estados Unidos está listo para trabajar con Argentina en esta transición histórica», dijo ayer el presidente de EE UU, Barack Obama, durante una rueda de prensa realizada en la Casa Rosada, sede del gobierno. «Interpretamos esta visita como un gesto de afecto y amistad en momentos en que el país tiene un nuevo horizonte, un cambio», respondió su homólogo argentino, Mauricio Macri, situado justo a su lado.

La presencia de Obama en Argentina significa un fuerte gesto de respaldo diplomático a la gestión de Macri, que lleva poco más de cien días en el poder tras imponerse en las elecciones presidenciales de finales de 2015. De esta forma, desplazó del gobierno después de ocho años a Cristina Fernández de Kirchner.

Apenas consiguió el triunfo en las urnas, Macri recibió signos de apoyo por parte de la Administración Obama, que en los años anteriores decidió enfriar la relación tras un incidente ocurrido en 2011, cuando el Gobierno argentino incautó «armamento y drogas», según el entonces ministro de Relaciones Exteriores Héctor Timerman, que traía un avión de la fuerza aérea estadounidense.

Días antes de su viaje a Argentina, Obama anunció la decisión de abrir archivos militares y de inteligencia con información sobre la última dictadura militar argentina (1976-1983), de cuyo inicio se cumplirán hoy 40 años.

«Voy a hacer un esfuerzo por abrir nuevos archivos. Hemos desclasificado varios, pero por primera vez vamos a desclasificar los registros militares y de inteligencia. Tenemos la plena determinación de hacer nuestra parte a medida que Argentina siga adelante como una nación unida. Espero que podamos reconstruir la confianza que se ha perdido entre nuestros países», sostuvo Obama. Macri agradeció «el gesto» del Gobierno de EE UU. «Si nosotros dialogamos con solidaridad y respeto, los países colaboran con nuestros pedidos», comentó.

Organismos defensores de los derechos humanos en Argentina –entre ellos Abuelas de Plaza de Mayo– habían pedido a EE UU la apertura de sus archivos con el objetivo de conocer la existencia, o no, de información relacionada con la represión ilegal de la última dictadura militar. Especialmente, la búsqueda está orientada a conocer datos acerca del robo de bebés nacidos en el cautiverio ilegal de sus madres y la apropiación de los mismos.

Obama y Macri, por medio de sus funcionarios, firmaron acuerdos para el intercambio de información en la lucha contra el crimen organizado, el terrorismo y el narcotráfico. «Estos convenios muestran un nuevo camino de trabajo conjunto. Es el inicio de un recorrido e implican un cambio importante en nuestra forma de relacionarnos», expresó la ministra de Relaciones Exteriores argentina, Susana Malcorra.

«Es un momento histórico para fortalecer y construir una agenda bilateral positiva», declaró el embajador estadounidense en Argentina, Noah Mamet. Los representantes de ambos países también impulsaron de forma conjunta un memorándum de entendimiento para prevenir el lavado de dinero. «La visita de Obama es como un gran foco que ilumina al país», dijo el embajador argentino en EE UU, Martín Lousteau.

Tras el encuentro con Macri, el mandatario estadounidense visitó la Catedral Metropolitana, donde hasta poco más de tres años oficiaba misa el papa Francisco cuando era cardenal de Buenos Aires. Luego se reunió con jóvenes estudiantes y representantes de sociedad civil, y más tarde encabezó un encuentro con empresarios. Obama viajó a Argentina con más de 800 dirigentes empresariales interesados en concretar inversiones en el país sudamericano. Por la noche, cenó con Macri en el Centro Cultural Néstor Kirchner, que se encuentra cerrado desde que asumió el nuevo gobierno.

El mandatario estadounidense tiene previsto recorrer hoy el Parque de la Memoria, un predio situado a orillas del Río de la Plata que rinde homenaje a los miles de argentinos que fueron secuestrados, torturados, asesinados y sus cuerpos desaparecidos durante el último régimen militar. En un principio, apenas se conoció que Obama visitaría el país, se evaluó la posibilidad de que estuviera en el edificio donde funcionó por décadas la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), principal centro de detención ilegal que tuvo Argentina entre 1976 y 1983. Desde allí, según el testimonio de sobrevivientes, aviones de las fuerzas armadas despegaban a diario y arrojaban opositores a la dictadura al Río de la Plata.

Sin embargo, por petición de las organizaciones de derechos humanos, Obama desistió de recorrer las instalaciones en las que desde 2004 funcionan espacios donde se recuerda a las víctimas de la represión y se realizan actividades culturales.

«Compartimos el respeto por los derechos humanos, la democracia, la justicia, y la paz. Siento que compartimos una visión sobre el siglo XXI que nos desafía», expresó finalmente Macri.