Estados Unidos

Obama: más impuestos y recortes sociales

El presidente de EE UU busca el apoyo republicano para aprobar las cuentas

Barack Obama en la presentación del presupuesto
Barack Obama en la presentación del presupuestolarazon

En un principio, se puede pensar que la nueva estrategia del presidente Barack Obama es ofrecer a los republicanos lo que le van a pedir antes de tiempo. Quizá para ahorrárselo. Así las cosas, el presidente envío ayer al Congreso un presupuesto para 2014 de 3,778 billones de dólares que incorpora por primera vez una serie de medidas que reducirán el coste de la Seguridad Social, programas de «Medicare» (cobertura médica para jubilados) y otras prestaciones federales. De esta forma, espera atraer a la mesa de negociaciones a los senadores republicanos, con los que cenó anoche en la Casa Blanca.

Una de cal y otra arena para convencer a propios y ajenos. Obama aceptaría un acuerdo para reducir el déficit que combine recortes en el gasto con el aumento de los impuestos. Y es éste el origen de sus mayores desencuentros con los republicanos, que se oponen a aumentar la presión fiscal. Pero las cuentas presentadas por el presidente también han disgustado a los más liberales del Partido Demócrata, que consideran los programas sociales intocables aunque el contexto exija hacer recortes. De esta forma, parece que Obama ha conseguido un imposible en Washington: unidad en el desacuerdo a sus propuestas. «No estaré conforme con un acuerdo que busque el recorte del déficit a costa de la clase media», indicó el presidente de EE UU. «Estoy dispuesto a tomar decisiones complicadas que puedan no ser muy populares en mi propio partido porque no puede haber vacas sagradas en ninguna agrupación política», recordó en clara referencia a la subida de impuestos para equilibrar el déficit. La propuesta para el próximo año fiscal, que empieza el 1 de octubre, contempla más de 700.000 millones de dólares durante los próximos 10 años en nuevos impuestos. «Podemos hacer crecer nuestra economía y a la vez reducir nuestro déficit», subrayó Obama en la Rosaleda de la Casa Blanca al presentar un plan que hace concesiones a la oposición para intentar un acuerdo presupuestario a largo plazo. Asi, prevé un déficit de 744.000 millones de dólares en 2014, un 4,4% del PIB menos que en años anteriores, pero aún en máximos históricos. Propuso también un recorte de 400.000 millones de dólares en el gasto médico y una reducción de 200.000 millones en subsidios agrícolas y asistencia a la jubilación. Otros 200.000 millones de dólares se recortarán de forma «discrecional», el 50% en defensa.

Obama tiene entre sus planes compensar las cuentas con la recaudación de alrededor 580.000 millones de dólares a través de reformas impositivas, entre ellas la aplicación de la llamada «Regla Buffet», que grava a los hogares con ingresos superiores a un millón de dólares anuales con una carga impositiva del 30%.