¿Y si la ofensiva rusa de primavera hubiese sido un bluf y Ucrania estuviese lista para lanzar un gran contraataque en Bajmut y todo el sur del país?

¿Y si la tan cacareada ofensiva rusa de esta primavera no solo se hubiese lanzado ya sino que, además, estaría agotándose con escasos resultados? Según un informe del think tank estadounidense Institute for Study of War, el ritmo de las operaciones ofensivas rusas en todo el teatro de operaciones se ha ralentizado en las últimas semanas, lo que sugiere que la ofensiva de primavera de Moscú en Donbas puede estar llegando a su culminación. Funcionarios ucranianos han indicado que las pérdidas rusas cerca de Vuhledar están siendo significativas, lo que estaría afectando severamente su capacidad para llevar a cabo más operaciones ofensivas en la región de Donetsk.

Este informe analiza la creciente preocupación rusa sobre una posible contraofensiva ucraniana cerca de Bajmut o en el sur de Ucrania, y los esfuerzos rusos para mitigarla. Y es que, según los datos recogidos, las fuerzas ucranianas habrían llevado a cabo un contraataque al suroeste de Bajmut. Las imágenes geolocalizadas publicadas el 19 de marzo indican que las fuerzas ucranianas llevaron a cabo una contraofensiva exitosa al suroeste de Ivanivske (seis kilómetros al oeste de Bajmut) y empujaron a las fuerzas rusas más allá de la carretera T0504 en el área.

El portavoz del Grupo de Fuerzas del Este de Ucrania, el coronel Serhiy Cherevaty, informó de que las fuerzas rusas realizaron 25 ataques en la zona ayer, 19 de marzo, pero solo habrían obtenido ganancias marginales. Fuentes rusas, por su parte, mostraron imágenes el 18 de marzo que mostraban una columna de vehículos blindados ucranianos a lo largo de la carretera T0504, al suroeste de Kostyantynivka (22 km al suroeste de Bajmut) y especularon con que se estaban preparando para lanzar operaciones de contraofensiva.

Un prominente milblogger ruso afirmó, según ISW, que las fuerzas ucranianas son actualmente capaces de intensificar los contraataques para estabilizar la línea del frente alrededor de Bajmut. Tanto es así, que las fuerzas rusas se sentirían cada vez más inseguras sobre su capacidad para mantener la iniciativa en torno a esta localidad que viene siendo el encarnizado objetivo por el que luchan ambos ejércitos. Los rusos llevan semanas tratando de tomar la ciudad, con especial protagonismo de los mercenarios del grupo Wagner, y, pese a que se ha anunciado varias veces su caída, por el momento Ucrania sigue manteniendo el control, aunque éste sea precario.

Las declaraciones hechas por oficiales militares ucranianos sobre el ritmo y las perspectivas de las actuales operaciones ofensivas rusas pueden sugerir que la ofensiva general de primavera planeada por Moscú puede estar llegando a su culminación. El coronel Cherevaty declaró ayer que Rusia no pudo reunir suficientes fuerzas para la gran ofensiva anticipada en Donbas y señaló que las acciones ofensivas actuales no pueden llamarse una "gran operación estratégica". Enfatizó Cherevaty que ni siquiera pueden completar la captura táctica de Bajmut, lo que respalda la evaluación de ISW de que la ofensiva del Grupo Wagner cerca de la localidad probablemente esté llegando a su culminación.

Las fuerzas rusas también están luchando notablemente para asegurar ganancias operativamente significativas en otros lugares a lo largo de la línea del frente, particularmente en las áreas de Avdiivka-Donetsk City y Vuhledar. El portavoz de las Fuerzas de Defensa de Ucrania Tavriisk, el coronel Oleksiy Dmytrashkivskyi, señaló ayer también que el enemigo ha estado atacando desesperadamente Avdiivka para reiniciar las operaciones ofensivas en Vuhledar, lo que probablemente sugiere que los continuos ataques rusos en el área de Avdiivka están destinados en parte a alejar las reservas ucranianas del oeste del óblast de Donetsk para el área de la ciudad de Avdiivka-Donetsk.

Los oficiales militares ucranianos continúan indicando además que las pérdidas rusas masivas en el área de Vuhledar están degradando gravemente la capacidad ofensiva rusa en toda la región de Donetsk. Según Dmytrashkivskyi, Moscú habría reforzado elementos de la 155.ª Brigada de Infantería Naval (actualmente muy comprometida en el área de Vuhledar) con fuerzas de reserva de la 98.ª División Aerotransportada de la Guardia. Esta brigada sufrió catastróficas pérdidas humanas y de material durante los continuos ataques fallidos contra Vuhledar en noviembre de 2022 y febrero de 2023, y es probable que el liderazgo militar ruso dependa en gran medida de los elementos de reserva de la 98.ª División Aerotransportada para contrarrestar y compensar dichas pérdidas.

Precisamente, la 98 División Aerotransportada está comprometida al menos parcialmente en el área de Kreminna en Lugansk, y el compromiso de algunos de sus elementos constitutivos con el área de Vuhledar sería indicativo de un nivel de desesperación por parte del comando militar ruso que intenta reconstituir las unidades maltratadas y reiniciar las operaciones ofensivas en el oeste de esta región.

El Estado Mayor ucraniano señaló de manera similar que el liderazgo militar ruso tiene prisa por enviar refuerzos a Vuhledar y ha estado creando un destacamento "Shtorm" dentro de la 37.ª Brigada Separada de Fusileros Motorizados (36.º Ejército de Armas Combinadas, Distrito Militar del Este), que presumiblemente despliegue en este área el 24 de marzo.

La reconstitución ad hoc de las unidades existentes para su despliegue en Vuhledar, así como la aparente creación de formaciones especiales escalonadas de subbrigadas, sugiere que las capacidades de combate rusas en el oeste del Óblast de Donetsk están muy degradadas.

Por lo tanto, es probable que la ofensiva general rusa de primavera se acerque a su culminación. Las ofensivas rusas en curso a lo largo de la línea Svatove-Kreminna, alrededor de Bakhmut y a lo largo de los frentes Avdiivka-Donetsk City y Vuhledar no han logrado ganancias tácticas importantes en los primeros meses de 2023. Rusia ha comprometido los aproximadamente 300.000 soldados movilizados, llamados por movilización parcial en septiembre de 2022 con el fin de llevar a cabo exactamente esa ofensiva de primavera, a estos diversos esfuerzos ofensivos. Si 300.000 soldados rusos no han podido darle a Rusia una ventaja ofensiva decisiva en Ucrania, es muy poco probable que el compromiso de fuerzas adicionales en futuras oleadas de movilización produzca un resultado radicalmente diferente este año. Por lo tanto, Ucrania está bien posicionada para recuperar la iniciativa y lanzar contraofensivas en sectores críticos de la línea de frente actual.