África

Congo

La OMS declara emergencia de salud pública internacional el brote de ébola en Congo

Han asegurado que esto no debe provocar que alguno de los países vecinos cierre su frontera ni recomienda ninguna restricción de viajes o comercio con el Congo

Dos médico trabajan en un centro de tratamiento en Beni, en el Congo
Dos médico trabajan en un centro de tratamiento en Beni, en el Congolarazon

Sin embargo han asegurado que esto no debe provocar que alguno de los países vecinos cierre su frontera ni recomienda ninguna restricción de viajes o comercio con la RDC

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha decidido declarar hoy que el brote epidémico de ébola en la República Democrática del Congo (RDC) se convierta en una emergencia sanitaria de alcance internacional, pero ha querido evotar el pánico y ha recalcado que el cierre de fronteras no es necesario. “Si bien no hay pruebas aún de una transmisión local del ébola en Goma, RDC o Uganda, estos eventos representan una preocupante expansión geográfica del virus”, ha explicado Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS. Es por esto que el organismo considera que “el riesgo de expansión del ébola en RDC y la región sigue siendo muy alto, mientras que el riesgo de expansión fuera de la región sigue siendo bajo”.

Tedros ha insistido en que “el comité no considera que los escáneres en los aeropuertos u otros puertos de entrada fuera de la región sean necesarios”, antes de agregar que “los países en riesgo deben trabajar urgentemente con los socios para mejorar su preparación”.

La decisión se ha tomado por recomendación del Comité de Emergencia de la OMS y el principal motivo de esta decisión es que se ha confirmado el primer caso confirmado del virus en la ciudad de Goma, capital de la provincia de Kivu Norte, a 350 kilómetros de lo que hasta ahora es el epicentro de este brote y a escasos 20 kilómetros de la frontera con Ruanda. De ahí la preocupación por la posible expansión. Tedros ha destacado que los países vecinos de RDC “deben continuar supervisando los movimientos de población y los patrones sociológicos que pueden predecir el riesgo de expansión de la enfermedad”. “La comunicación sobre riesgos y la interacción con las comunidades, especialmente en los puntos de entrada, debe ser incrementadas”, ha dicho, al tiempo que ha subrayado que “los países en riesgo deben aprobar los medicamentos y vacunas experimentales como una prioridad inmediata”.

En el caso de RDC ha destacado que el país debe “seguir fortaleciendo el trabajo de concienciación y preparación con las comunidades, supervisar los movimientos a través de las fronteras y a nivel interno, así como “fortalecer” la vigilancia.

El director ejecutivo de la OMS ha destacado además que el Gobierno de RDC “está mostrando una transparencia excepcional al compartir información cada día”. “Están haciendo todo lo que pueden. Necesitan el apoyo de la comunidad internacional, incluido apoyo financiero”, ha recalcado.

Médicos Sin Fronteras, en un comunicado, ha valorado positivamente la decisión de la Organización Mundial de la Salud. “Las señales son claras: la gente sigue muriendo en las comunidades, los trabajadores sanitarios continúan contagiándose y la transmisión no se detiene”, afirma Joanne Liu, presidenta Internacional de Médicos Sin Fronteras (MSF). “La epidemia no está bajo control y necesitamos un cambio de marcha, de velocidad. Pero este cambio no debe realizarse a costa de las restricciones de movimiento ni del uso de medidas coercitivas sobre la población afectada”.