La OTAN baraja la posibilidad de derribar los misiles rusos que se aproximen a sus fronteras

Varsovia no quiere quedarse de brazos cruzados ante este tipo de situaciones. El viceministro de Asuntos Exteriores polaco, Andrzej Szejna, declaró el martes a la emisora de radio local RMF24 que la OTAN estudia la posibilidad de derribar los misiles rusos que se aproximen demasiado a sus fronteras.

Es una de las respuestas que se están debatiendo en el seno de la Alianza tras el incidente del pasado domingo, cuando un misil de crucero ruso sobrevoló el espacio aéreo de Polonia durante 39 segundos. «Pero esto solo podría hacerse con el acuerdo de la parte ucraniana y teniendo en cuenta las consecuencias internacionales», matizó Szejna en la entrevista.

El ministro de Defensa polaco, Władysław Kosiniak-Kamysz, aseguró que sus Fuerzas Armadas habían activado todos sus sistemas antiaéreos, y que el misil habría sido derribado si hubiera habido el menor indicio de que se dirigía a un objetivo en territorio polaco. En esta línea, Szejna apuntó que Rusia «sabía que si el misil se adentraba más en Polonia, sería derribado. Habría un contraataque».

Polonia ya había informado a finales de diciembre de que un misil ruso había entrado en su espacio aéreo antes de abandonarlo unos minutos después, en dirección a Ucrania. Un año antes, en diciembre de 2022, otro misil de crucero ruso KH-55, capaz de transportar cabezas nucleares, había caído en territorio polaco, pero sus restos no fueron encontrados hasta abril de 2023 por un transeúnte en un bosque cerca de Bydgoszcz, en el norte, a unos 500 km de la frontera oriental del país.

Ya en noviembre de 2022, dos personas murieron al caer un misil antiaéreo ucraniano en la localidad polaca de Przewodow, cerca de la frontera con Ucrania.

El Gobierno de Donald Tusk convocó al embajador ruso en Varsovia, Serguéi Andreyev, en respuesta al incidente del domingo. Pero el diplomático ignoró la citación. El ministro de Asuntos Exteriores polaco, Radosław Sikorski, dijo haber tratado este asunto con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, en una conversación telefónica en la que Stoltenberg reiteró que la Alianza «había aumentado considerablemente su vigilancia y reforzado sus posiciones en el flanco oriental de la Alianza, en particular en Polonia».