América Latina

Petro expulsa a Guaidó a EE UU en plena cumbre sobre Venezuela

El presiente colombiano propone fijar un calendario electoral al tiempo que se relajan las sanciones contra Caracas

El presidente colombiano, Gustavo Petro, anunció el rescate de los cuatro niños
El presidente colombiano, Gustavo PetroEuropa Press

Con la aspiración del presidente colombiano Gustavo Petro de que las conclusiones y recomendaciones de la Conferencia internacional sobre Venezuela en Bogotá «sean de buen recibo tanto por la oposición venezolana, como por su Gobierno, pero sobre todo, por las poblaciones», inició ayer el encuentro con presencia de representantes de 19 países y la Unión Europea, encabezada por Josep Borrell.

Impulsar la democracia en Venezuela y que se reactiven las negociaciones políticas entre el régimen del presidente Nicolás Maduro y la oposición, congeladas desde noviembre pasado en México, son los objetivos de la cumbre que se desarrolló el primer día a puerta cerrada en la sede del Ministerio colombiano de Asuntos Exteriores.

La conferencia dio inicio con un discurso inaugural de Gustavo Petro durante el cual ratificó que «en el caso venezolano hay que ir sobre dos rieles: cronograma de elecciones y sus garantías, para que el pueblo venezolano pueda decidir libremente qué quiere, sin presiones. También el otro riel del levantamiento de las sanciones».

Para Petro, una gran «conquista» sería lograr fijar «un cronograma de levantamiento paulatino de sanciones», la gran aspiración del chavismo y en lo que EE UU tiene un papel protagonista. Ya Washington ha dicho que toda flexibilización de sus medidas depende de las acciones concretas de Maduro para democratizar el país.

«Ojalá la gran conquista sea que los deseos y las esperanzas del pueblo venezolano se vuelvan realidad, que no sea un pueblo que se asuste con nada, sino que sea libre y pueda tomar sus decisiones en profunda libertad, sin que nadie fuera ni dentro de su país los presione para tomar decisiones contrarias a su propia voluntad política», agregó el presidente colombiano. Sostuvo también que el reingreso de Venezuela al Sistema Interamericano de Derechos Humanos «sería una gran conquista». Hugo Chávez retiró al país de esa instancia en 2012.

El encuentro internacional comenzó casi una hora después de lo originalmente pautado, y a las afueras del recinto que lo albergaba se concentró un grupo de venezolanos para manifestarse. Cantaron el himno de Venezuela y pidieron que se permita el voto libre a los inmigrantes y refugiados en el extranjero. Continuaron alzando su voz para «ser escuchados». Michael Grant, viceministro Adjunto para las Américas de Canadá, dijo que esperaba «conversaciones productivas». Y Borrell recordó que lo importante era «impulsar la vuelta a la vía democrática de Venezuela desde la base de los acuerdos» para así poder «destrabar las negociaciones en México».

La conferencia comenzó horas después de que Juan Guaidó saliera de Colombia y llegara a Miami, denunciando haber sido expulsado.

El Gobienro de Petro, aunque con versiones contradictorias, aseguró que el opositor había partido por voluntad propia, y le criticó en voz de Petro y del ministro de Exteriores, Álvaro Leyva.

Entretanto, la Plataforma Unitaria opositora condenó que el régimen de Maduro pidiera impunidad como exigencia en las negociaciones políticas, al llamar a que las investigaciones por delitos de lesa humanidad que cursan en la Corte Penal Internacional sean suspendidas. La declaración de Maduro y su jefe negociador Jorge Rodríguez ocurrió en la noche del lunes.