Una bebé fue abandonada el martes por la tarde frente a una vivienda en Tennessee (Estados Unidos), y poco después, sus padres, su abuela y su tío adolescente fueron hallados muertos en un bosque a varios kilómetros de distancia.

Todo comenzó pasadas las 3 de la tarde, cuando una residente de una zona tranquila del condado de Dyer alertó a las autoridades tras encontrar a una bebé sola, sentada en un portabebés, en su jardín. Testigos relataron haber visto un vehículo, posiblemente una minivan oscura o una SUV blanca, detenerse brevemente, dejar a la niña y alejarse a toda velocidad.

A pesar de las altas temperaturas que alcanzaban los 38 grados, la menor fue encontrada ilesa y trasladada de inmediato a cuidados asistenciales por los servicios de emergencia del condado de Crockett.

Lo que parecía ser un abandono en circunstancias extrañas pronto se transformó en una tragedia aún mayor. Esa misma noche, a unos 40 kilómetros de distancia, las autoridades localizaron los cuerpos sin vida de cuatro personas en una zona boscosa del condado de Lake. Se trataba de Adrianna Williams, de 20 años, madre de la bebé; Matthew Wilson, de 21, padre de la menor; Cortney Rose, de 38 años, abuela materna; y Braydon Williams, de 15 años, hermano de Adrianna.

Fuentes cercanas a la investigación describieron los homicidios como ejecuciones planificadas, cometidas con extrema violencia. Las autoridades creen que el responsable, o los responsables, abandonaron a la niña poco antes o después de cometer los asesinatos, en lo que califican como un acto deliberado y dirigido.

La Oficina de Investigación de Tennessee (TBI) ha asumido el liderazgo del caso, que se encuentra bajo una intensa investigación. El fiscal de distrito Danny Goodman Jr., que supervisa ambos condados involucrados, aseguró que no se trata de un crimen aleatorio. “Todo apunta a que las víctimas fueron seleccionadas. Hay muchos elementos que aún debemos esclarecer”, explicó.

Entre tanto, agentes estatales y federales trabajan para determinar el recorrido exacto del sospechoso o sospechosos, incluyendo si los homicidios ocurrieron antes o después del abandono de la menor. Equipos forenses recuperaron dos vehículos de la escena del crimen y ahora tratan de establecer si coinciden con los que fueron vistos por los testigos.

Mientras se intensifica la búsqueda del culpable, la niña permanece bajo custodia del estado, en un entorno seguro. Personas cercanas a la familia aseguran que ni Adrianna ni Matthew habrían dejado sola a su hija voluntariamente, reforzando la teoría de un ataque externo.

“Estamos ante uno de los crímenes más inquietantes que hemos visto en los últimos años en Tennessee”, señaló el sheriff del condado de Lake, Bryan Avery. “La investigación sigue abierta y contamos con todos los recursos disponibles para llegar al fondo de este caso”.