Open Arms

Problemas técnicos retrasan la esperada salida del primer barco con ayuda para Gaza

El barco de la ONG española Open Arms está atracado en Chipre

La salida del primer barco que cubrirá el corredor marítimo entre Chipre y la Franja de Gaza con ayuda humanitaria se ha retrasado por razones técnicas, ha anunciado este lunes el Gobierno chipriota, que aún confía en una salida inminente una vez se solucionen estos problemas.

El barco de la ONG Open Arms iba a zarpar el fin de semana, pero el ministro de Exteriores, Constantinos Kombos, ha confirmado en una entrevista que los planes se han retrasado por problemas que, en cualquier caso, no ha considerado graves.

Según la televisión pública, la infraestructura necesaria para el desembarco de la ayuda aún no está lista. Kombos, no obstante, ha subrayado el compromiso de las autoridades de Chipre con esta iniciativa, apuntando que ya hay un segundo barco a la espera para tratar de llevar ayuda a la Franja y aliviar así la delicada situación humanitaria de la población gazatí.

Open Arms aseguró este lunes a EFE que la embarcación está lista para partir y que el retraso se trata de una cuestión diplomática o política.

"No podemos confirmar cuándo será la salida, pero ni en World Central Kitchen o en Open Arms hay problemas técnicos en ninguno de los lados de la operación, y estamos listos para zarpar", señaló Laura Lanuza, directora de Comunicaciones y Proyectos de la ONG.

World Central Kitchen, fundada por el conocido chef español José Andrés, será la organización encargada de recoger y repartir sobre el terreno en Gaza las 200 toneladas de comida que tiene previsto transportar Open Arms hasta la Franja.

La operación de las dos ONG comenzó a planearse hace meses y el barco de Open Arms llegó a Chipre a mediados de febrero para abrir un corredor marítimo y aliviar la dura situación humanitaria causada por el bloqueo de Israel y por sus ataques de castigo contra Gaza en respuesta a la ofensiva terrorista de Hamás del pasado 7 de octubre.

Según Open Arms, su operativo humanitario cuenta con la autorización del Gobierno de Chipre, de Israel y de la Autoridad Nacional Palestina.