Putin envía a La Habana una flotilla de la Marina rusa con una fragata y un submarino nuclear

Una flotilla de la Marina rusa con una fragata y un submarino nuclear ha llegado este miércoles a las costas de La Habana para una visita de cinco días a la isla de Cuba. Una demostración de fuerza militar que se produce en mitad de la escalada entre Washington y Moscú como consecuencia de la invasión a gran escala de Ucrania.

El submarino Kazan, que, según las autoridades cubanas, no lleva armas nucleares, iba acompañado de la fragata Almirante Gorshkov, así como de un petrolero y un remolcador de salvamento. El Kazan y el Almirante Gorshkov, uno de los buques de guerra más modernos de Rusia, podían verse a poca distancia de La Habana, que está a unos 145 km de la punta de Florida. El petrolero Pashin y el remolcador, que enarbolan el tricolor blanco, azul y rojo de Rusia, entraron en el puerto a primera hora de la mañana del miércoles, según France-Press.

El Gobierno cubano anunció ayer que su ministro de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez, se reuniría este miércoles en Moscú con su homólogo ruso, Serguéi Lavrov. El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, hizo lo propio el mes pasado con su homólogo ruso, Vladimir Putin, para asistir al desfile militar anual del 9 de mayo en la Plaza Roja, frente al palacio del Kremlin.

Durante la Guerra Fría, Cuba fue un importante Estado cliente de la Unión Soviética. El despliegue de emplazamientos de misiles nucleares soviéticos en la isla desencadenó la crisis de los misiles cubanos de 1962, cuando Washington y Moscú estuvieron a punto de entrar en guerra. Las relaciones entre Rusia y Cuba se han estrechado desde el encuentro entre Díaz-Canel y Putin en 2022.