Putin golpea el corazón de la ciudad natal de Zelenski

Mientras que el probable ataque con drones ucranianos contra Moscú ocupaba los titulares de la mayoría de los medios, Rusia intensificó ayer su ofensiva y continuó con sus ataques contra civiles. El objetivo principal del Ejército de Vladimir Putin de ayer fue castigar las áreas residenciales de Kryvyi Rig, la ciudad natal del presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, y un importante centro industrial en el corazón del país. Dos misiles balísticos alcanzaron un bloque residencial de nueve pisos y una universidad cercana, matando a al menos seis personas y aterrorizando a la población civil.

Una operación de rescate masiva, que involucró a 250 trabajadores de emergencia, todavía estaba en curso en el edificio. Los cinco pisos superiores fueron completamente destruidos. Se recuperaron seis cuerpos de entre los escombros, entre ellos una mujer y su hija de 10 años. 73 civiles resultaron heridos, según las autoridades locales. «La gente tiene cortes, fracturas y lesiones por explosivos», reveló el ministro de asuntos internos de Ucrania, Igor Klymenko.

«Esto ya es una especie de realidad cotidiana genocida», comentó Myjailo Podoliak, asesor de la Oficina Presidencial de Ucrania. Agregó que el derecho internacional nunca funcionará si el agresor no ve un poder real detrás de él y pidió «cerrar los cielos ucranianos con sistemas de defensa antimisiles y de defensa aérea». «Me rompe el corazón que docenas de sistemas de defensa aérea en todo el mundo simplemente acumulen polvo mientras los necesitamos tanto», compartió Kira Rudyk, parlamentaria de Ucrania.

Una imagen del sitio reveló una inscripción sobre una pizarra en la pared de la universidad de Kryvyi Rig destruida por un misil ruso: «La ciencia es lo más importante, lo más hermoso y lo más necesario en la vida de una persona». El ministerio de Defensa ucraniano comentó que «los rusos, sin embargo, se suscriben a un conjunto diferente de creencias. Para ellos, el fin de la existencia humana parece residir en sacrificarse en nombre de un dictador y librar guerras del imperialismo».

Cuatro personas también murieron en Jersón, donde el centro de la ciudad fue atacado por sistemas rusos de lanzacohetes múltiples. La ciudad, que fue liberada por el Ejército de Ucrania en noviembre, ha sido atacada casi todos los días desde entonces por las fuerzas rusas ubicadas al otro lado del río Dnipro. El jefe de la administración local, Oleksandr Prokudin, reveló que uno de los fallecidos y seis de los heridos eran trabajadores de servicios comunales, mientras que otros cinco heridos eran voluntarios que ayudaban a los vecinos a lidiar con las consecuencias de los bombardeos y la reciente inundación provocada por Moscú.

«Tal intensidad de los bombardeos está relacionada con la rotación de las tropas enemigas», dijo a los habitantes de la ciudad. «Rusia ha repuesto sus fuerzas, que previamente habían sido derrotadas por nuestras Fuerzas Armadas. Las destruiremos también, pero tendremos que esperar un poco».

«Implacables ataques rusos en Kryvyi Rig, Jersón, Kramatorsk y Járkiv. Ucrania tiene todo el derecho a defenderse y contraatacar. De lo contrario, la brutalidad rusa no se detendrá», subrayó la experta en seguridad ucraniana Mariia Avdeeva.

170 batallas ocurrieron en la semana anterior a lo largo de la parte oriental de la línea del frente, según la viceministra de Defensa de Ucrania, Hanna Maliar, con las fuerzas invasoras y defensoras compitiendo por la iniciativa. El funcionario reveló que Rusia siguió buscando puntos débiles en el norte, cerca de Kupyansk, donde intentó empujar a los ucranianos detrás del río Oskil. «No tuvieron éxito. Nuestras fuerzas de defensa están frenando a las tropas enemigas», informó.

Mientras tanto, Ucrania ha progresado en el sur, donde recuperó Staromayorske del control ruso y «logró éxitos» en la dirección de Mala Tokmachka y Robotyne. 12,6 km cuadrados adicionales fueron liberados en la última semana, con el área total reconquistada en la zona ahora igual a 204,7 km cuadrados, según Maliar. Cada metro se recupera con gran dificultad, en particular debido a los territorios extensos minados por Rusia, dijo Oleksandr Pivnenko, jefe de la Guardia Nacional de Ucrania. Advirtió que no cabía esperar la repetición de una operación ultrarrápida tipo la de Járkiv. Lo más importante durante esta contraofensiva es el avance diario del Ejército ucraniano, incluso de varios cientos de metros por día, subrayó. Pivnenko está convencido de que Ucrania podrá llegar a las fronteras anteriores a la guerra después de que sus fuerzas encuentren «un punto débil» de las tropas rusas y logren un gran avance, pero «llevará tiempo».

Mientras tanto, la mano derecha de Zelenski, jefe de su administración presidencial Andriy Yermak, anunció la reunión en Arabia Saudí de asesores de seguridad nacional de varios países sobre la implementación de la Fórmula de Paz de Zelenski. Según el diario Wall Street Journal, la reunión tendrá lugar en Yeda los días 5 y 6 de agosto. Participarán representantes de 30 países, entre ellos EE UU, los países más grandes de la UE e India, Brasil, Indonesia, Egipto, México, Chile y Zambia.

Varios analistas explican que Ucrania y Rusia compiten por el apoyo de esos y otros países que se consideran neutrales. Muchos de ellos condenan el ataque de Moscú a la soberanía de Ucrania, pero, según se informa, no están listos para apoyar plenamente la fórmula de paz de Zelenski. La celebración Arabia Saudí es otro paso más hacia una Cumbre de la Paz más grande que Zelenski espera que apoye su plan de paz, que se basa en que Rusia retire sus fuerzas de todas las partes ocupadas de Ucrania y libere a todos los ucranianos cautivos, así como en garantizar la seguridad nuclear, seguridad alimentaria y energética y justicia por los delitos cometidos por los rusos.