
Defensa
Por qué los marines de EEUU empiezan a abandonar el país con más bases militares estadounidenses en el mundo
Estados Unidos cuenta con instalaciones y soldados desplegados en muchos países del planeta por sus compromisos con la OTAN o protección de Oriente Medio e Indo-Pacífico

Estados Unidos tiene presencia militar en buena parte del planeta, con instalaciones en varios países de Europa, Oriente Medio o Asia. Puntos estratégicos en la política internacional de Washington en cada lado del mapa, aunque en algunos casos, la Administración Trump da marcha atrás con la retirada de efectivos. Y curiosamente, los marines de EEUU están empezando a abandonar Japón, el país con más bases militares estadounidenses del mundo.
El país nipón lidera en número de bases, con 120 instalaciones, y tiene una gran cantidad de tropas estacionadas, siendo siempre de los más destacados junto a Alemania, con 119, y y Corea del Sur, los tres territorios como puntos estratégicos. También otros países cuentan con importante presencia de EEUU como Reino Unido, Yibuti o Kuwait y Qatar en Oriente Medio.
Y de todo el personal estadounidense que se encuentra en Japón, el 70% está en la isla de Okinawa, donde comenzó la construcción de bases tras el fin de la Segunda Guerra Mundial. Fueron construidas sobre suelo expropiado, pues había sido escenario de una de las batallas más sangrientas en la Gran Guerra.
La región, tras el final de la Guerra del Pacífico y la derrota de Japón, quedó bajo administración estadounidense hasta 1972. Durante ese tiempo, se instalaron numerosas bases estadounidenses que parecían tener una duración limitada, pero a día de hoy, continúan activas. Ocupan una quinta parte de la superficie de la isla, lo que ha llevado al archipiélago japonés a pedir una reducción de bases, y parece que el plan no va mal encaminado.
Por qué Estados Unidos ralentizas la retirada de soldados de las bases militares de su ejército en Japón
Según explica The New York Times, a principios de año 105 marines estadounidenses abandonaron la isla nipona para ser redirigidos a una nueva base en Guam, un reajuste que suponía la primera vez que las fuerzas estadounidenses reducían su número en Okinawa, como parte de una acuerdo entre Washington y Tokio.
La reubicación fue acordada hace doce años, pero las negociaciones constantes, tensas y desacuerdos se remontan a 1995, debido a un crimen en el que tres militares estadounidenses agredieron sexualmente y violaron a una estudiante de la isla. Se prevé, desde hace años, que hasta 9.000 (casi la mitad de los que se encuentran en la isla hasta el momento) cambien de destino. Y para poner en contexto, el primer acuerdo se formuló en 1996 para reducir la presencia estadounidense en un plazo "de cinco a siete años". Casi treinta años después, está lejos de cumplirse una mínima parte.
Según explica Christopher Johnstone, exdirector del Noreste Asiático en la Oficina del Secretario de Defensa, a The New York Times, desde 2013 "solo se han trasladado un centenar de marines". "Ambas partes saben que las cosas no avanzan, pero ninguna tiene incentivos de actuar".
Desde la Administración Trump creen que es necesario que permanezcan en Japón por su posición geográfica y el control en el IndoPacífico, pero el primer ministro nipón prometió en una ceremonia en la que se conmemoraba el 80 aniversario de la batalla de la isla que dejó más de 200.000 muertos en 1945 que se reduciría el número de bases estadounidenses en Okinawa porque la región "sigue soportando una carga desproporcionada".
Esto haría que el número de bases militares estadounidenses en Japón se reduzca considerablemente. Pero lo cierto es que desde Washington temen la amenaza de China, y sobre todo, la intensificación de las actividades militares de Pekín en aguas próximas a Okinawa y en la proximidad de Taiwán y de las Islas Senkaku, administradas por Tokio pero reclamadas por las autoridades chinas.
Expertos creen que se podría demorar una década más, no solo por la tensa situación con Pekín, sino además, también por la finalización de la construcción de las bases de reemplazo. Suficiente para retrasar la retirada de la mayoría de estas bases y del personal que le acompaña.
✕
Accede a tu cuenta para comentar


