Guerra en Europa
Ucrania enfrenta el mayor ataque de la invasión: 711 drones rusos derribados en una noche
Moscú ha lanzado esta noche 728 drones y 13 misiles Kinzhal e Iskander, según Zelenski
En la noche del martes al miércoles, Ucrania sufrió el mayor ataque aéreo ruso desde el inicio de la invasión hace más de 40 meses, con 728 drones kamikaze de largo alcance y 13 misiles. La ciudad de Lutsk, a 80 km de Polonia y 120 km de Bielorrusia, fue el principal blanco de los ataques, que se prolongaron en varias oleadas durante gran parte de la noche.
El asalto comenzó con decenas de drones "Shahed" de diseño iraní, cuyas primeras explosiones resonaron alrededor de las 2 de la madrugada. A estos les siguieron ataques con misiles aerobalísticos "Kinzhal" y misiles de crucero X-101/Iskander. Las autoridades locales no reportaron víctimas, pero informaron que una empresa local y un amplio estacionamiento sufrieron daños.
"Estuve al teléfono toda la noche con mi hija, quien estaba muy angustiada, intentando calmarla. Sentía cómo temblaba la casa", relató a LA RAZÓN Mariana, una profesora de música de 43 años de Lutsk. Gracias a la eficaz respuesta de la aviación y las defensas antiaéreas ucranianas, se evitaron daños mayores. De los drones rusos, 711 fueron derribados o neutralizados mediante sistemas de defensa radioelectrónica, así como los siete misiles de crucero, según la Fuerza Aérea de Ucrania.
Sin embargo, se registraron impactos directos en cuatro puntos, y fragmentos de proyectiles interceptados cayeron en al menos 14 lugares adicionales. Además de Lutsk, 10 regiones ucranianas, incluidas Kyiv y Járkov, reportaron daños, según informó el presidente Volodímir Zelenski.
Los ataques rusos ahora son más efectivos
"Este ataque de exhibición ocurrió justo después de múltiples intentos de paz, todos rechazados por Rusia", denunció Zelenski. Destacó que decenas de drones fueron derribados por interceptores ucranianos, una tecnología innovadora que se está desarrollando rápidamente para contrarrestar las cambiantes estrategias rusas, que han reducido la eficacia de las defensas antiaéreas tradicionales.
Según el analista militar Oleksandr Kovalenko, en la primera semana de julio, aproximadamente el 20% de los drones rusos alcanzaron sus objetivos, un aumento significativo respecto al 3% registrado en enero. Señala que Rusia seguirá intensificando sus ataques contra las ciudades ucranianas, tratando de sumir a la población civil en el pánico mientras no logra un avance decisivo en la línea del frente.
El presidente ucraniano calificó el ataque como "una prueba más de la necesidad de sanciones severas contra las exportaciones de petróleo, que llevan más de tres años financiando la maquinaria bélica de Moscú". "Quienes desean la paz deben actuar", insistió Zelenski. "Nuestros socios saben cómo ejercer presión para obligar a Rusia a buscar el fin de la guerra, no nuevos ataques".
Los ataques aéreos rusos continuaron todo el miércoles. En la región orienta de Donetsk, dos civiles que viajaban en un vehículo fueron asesinados por un dron en Rodinske, y tres hombres murieron por una potente bomba aérea en Kostiantinivka. En Jerson, un niño de un año perdió la vida tras el impacto de explosivos arrojados por un dron ruso en el patio de una vivienda, dejando también herida a su abuela de 64 años. 18 vecinos resultaron heridos y uno murió el martes en la región sureña, donde continúa el "safari humano" con drones rusos lanzados desde la otra orilla del río Dnipro.