Honduras
Sale en libertad el expresidente hondureño Juan Orlando Hernández tras el indulto de Trump
La decisión del presidente de EE UU ha agitado el panorama político en Honduras tras las elecciones celebradas el domingo
El expresidente hondureño Juan Orlando Hernández, condenado en Estados Unidos por conspirar para introducir alrededor de 400 toneladas de cocaína en territorio estadounidense, recuperó su libertad este lunes tras recibir un indulto presidencial de Donald Trump. La medida, inesperada y controvertida, ha generado fuertes críticas en Washington y ha añadido un nuevo elemento de tensión en Honduras, donde continuaba el estrecho conteo de votos de las elecciones presidenciales.
Hernández, de 57 años, fue liberado de la penitenciaría federal de Hazelton, en West Virginia, después de casi cuatro años de reclusión. Su esposa, Ana García, confirmó la noticia mediante un mensaje en la red social X, donde agradeció a Trump por devolverle la libertad al exmandatario. "Después de casi cuatro años de dolor, de espera y desafíos, mi esposo vuelve a ser un hombre libre", escribió, acompañando el mensaje con una captura del registro oficial del Buró Federal de Prisiones.
La escena de celebración se trasladó a Tegucigalpa, donde la familia de Hernández se reunió en su residencia para agradecer su regreso. Fue precisamente en ese mismo hogar donde en 2022 las autoridades hondureñas detuvieron al exmandatario para extraditarlo a Estados Unidos, solo meses después de haber dejado la presidencia tras dos mandatos consecutivos.
Un indulto contradictorio en plena cruzada antidrogas
El perdón otorgado por Trump llega en un momento en que su gobierno ha reforzado públicamente su postura contra el narcotráfico. El mandatario ha ordenado ataques contra embarcaciones en el Caribe sospechosas de transportar drogas y ha prometido una política de "mano dura" contra las organizaciones criminales internacionales. Que en este contexto indulte al expresidente condenado por uno de los mayores casos de narcotráfico en la historia reciente ha desconcertado incluso a integrantes de su propio partido.
Trump defendió la decisión argumentando que, según personas "a las que respeta profundamente", Hernández había sido tratado de forma "muy dura e injusta". En declaraciones a periodistas durante un vuelo en Air Force One, sugirió que el caso habría sido una "trampa política" montada durante la administración Biden. "En cualquier país se venden drogas. Eso no significa que tienes que arrestar al presidente", afirmó, al ser interrogado sobre qué evidencias sustentaban su teoría.
La Casa Blanca reforzó ese discurso. Su portavoz, Karoline Leavitt, calificó la condena de Hernández como un caso de "sobreprocesamiento" por parte del gobierno de Biden y aseguró que durante el juicio surgieron elementos "extremadamente preocupantes" sobre la validez del proceso.
Reacciones bipartidistas de rechazo en Washington
El indulto generó una inusual coincidencia entre legisladores republicanos y demócratas, quienes lo consideraron un retroceso en la lucha contra el narcotráfico. El senador republicano Bill Cassidy cuestionó en X la decisión: "¿Por qué perdonar a Hernández mientras buscamos encarcelar a Maduro por traficar drogas hacia Estados Unidos? Encerremos a todos los narcotraficantes".
El senador demócrata Tim Kaine fue aún más contundente al calificarlo de "impactante". Recordó que Hernández fue condenado por una corte federal estadounidense que consideró probado que el exmandatario buscó "inundar de cocaína" el país y que actuó como líder de una vasta red criminal. "Esto sugiere que al presidente Trump no le importa la lucha contra el narcotráfico, e incluso plantea dudas sobre si los indultos están en venta", afirmó en una entrevista televisiva.
La liberación del exmandatario pone en evidencia los contrastes entre la retórica antidrogas de Washington y las decisiones políticas que emergen desde la Casa Blanca. También reabre el debate sobre la relación entre poder, justicia y diplomacia en una región marcada por la fragilidad institucional y la permanente sombra del narcotráfico.