Sandra Torres y Bernardo Arévalo pasan a la segunda vuelta en Guatemala

Nadie se lo esperaba. Las encuestas lo ponían en séptimo y hasta octavo lugar. Pero Bernardo Arévalo finalmente escaló hasta el segundo lugar de las preferencias electorales en Guatemala y en la primera vuelta de las presidenciales de este domingo logró pasar a la segunda vuelta. Con 11,8% de los votos la «sorpresa» de la ocasión se enfrentará a la exprimera dama Sandra Torres que obtuvo 15,7% de apoyo en los comicios.

El hartazgo y la desafección social con la política guatemalteca se vio reflejado en la cantidad de votos nulos: fue la primera opción, al lograr 17,3%. La abstención escaló hasta el 40% de los 9,3 millones de votantes.

Los candidatos Carlos Pineda, Thelma Cabrera y Roberto Arzú, que tenían buenos números en los sondeos, habían sido impedidos de postularse por la autoridad electoral y promovieron el voto en protesta. En todo caso, el Tribunal Supremo Electoral de Guatemala dijo que «los resultados que hay son prácticamente invariables», cuando el escrutinio había alcanzado el 98%. Sandra Torres Casanova es la exesposa de Álvaro Colom, de quien se divorció en 2011 para poder participar en las elecciones de aquel año. No pudo hacerlo y lo intentó finalmente en 2015, cuando fue derrotada en segunda vuelta. Mismo destino que en 2019 frente el actual mandatario, Alejandro Giammattei.

Periodista y empresaria de 67 años, Torres comenzó su carrera política como una socialdemócrata aunque sus posiciones se han hecho cada vez más conservadoras. Su candidato a vicepresidente, de hecho, es un pastor evangélico. Cuando fue primera dama se convirtió en figura clave del combate contra la pobreza mediante programas de subsidios y nuevas instituciones, y se decía que tenía más poder que el vicepresidente.

La primera vuelta confirmó que en las zonas urbanas no logra tener buen eco. En las zonas más rurales arrasó tras prometer reiniciar sus programas sociales, eliminar impuesto a los alimentos, otorgar un salario mínimo a las madres solteras y militarizar la seguridad pública como Nayib Bukele en El Salvador.

Arévalo, por su parte, se estrena como candidato presidencial. Es hijo del exmandatario Juan José Arévalo Bermejo –el primer presidente electo por voto popular en Guatemala– y sacó sus mejores números en las áreas urbanas del país.

El sociólogo y exdiplomático de 64 años también fue viceministro de Exteriores y embajador en España. Actualmente es diputado en el Congreso. Se le ubica en la izquierda moderada y los analistas lo consideran un intelectual. El partido Semilla, del cual es fundador, se define como socialdemócrata y progresista, y nació primero como un grupo de análisis tras las protestas de 2015 que llevaron a Otto Pérez Molina, posteriormente condenado por corrupción. En la campaña dijo que luchará contra la corrupción en el Estado, fortalecerá la Policía Nacional Civil y generará empleo invirtiendo en la infraestructura del país.

Torres se enfrentando a una opción de izquierdas en un país que vota mayoritariamente por la derecha. Es la primera vez que le ocurre, pues las anteriores oportunidades otras candidaturas conservadoras pasaron a segunda vuelta y la derrotaron.