La fiscal Ortega: «Sólo un hecho violento me apartará de mi puesto»

La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, se ofrece como mediadora para evitar la violencia.

La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, es la mujer del momento. Odiada por el chavismo, del que emergió y posteriormente salió, y vitoreada por la oposición, que la rechazó a lo largo de su gestión, dijo ayer que no teme ser encarcelada por sus acciones de denuncia de la ruptura del orden constitucional y de rechazo a la Asamblea Nacional Constituyente del 30 de julio. Asimismo, la fiscal señaló que le gustaría convertirse en un factor para el diálogo y que podría sostener un encuentro franco con Nicolás Maduro y con Maikel Moreno, presidente del Tribunal Supremo de Justicia, el mismo que ha hecho sentencias contra su despacho, como la del nombramiento impuesto de una vicefiscal sin pasar por los pasos que exige la ley.

En una entrevista de radio con el periodista venezolano Vladimir Villegas, Ortega señaló que el proceso de antejuicio de mérito que lleva adelante el Tribunal Supremo de Justicia es ilegal y tiene visos de misterio. «Si la solución de este país [por Venezuela] pasa porque esté privada de libertad, estoy dispuesta a hacerlo. Todo es posible. Lo máximo que pueden hacer es que me maten. Que lo hagan», destacó con voz segura la fiscal general. Ortega Díaz reveló que se mantendrá firme en su puesto de fiscal de la República, todo en aras de garantizar la democracia. Afirmó que, pese a los ataques a los que han sido sometidos trabajadores del Ministerio Público, su familia y ella misma con la prohibición de salida del país y congelación de sus bienes, no tiene miedo.

«Estoy dispuesta a permanecer en el Ministerio Público a menos que por un hecho violento, un acto de facto, lo hagan directamente. Eso fue lo que hicieron en la Asamblea Nacional [cuando grupos oficialistas asaltaron el Legislativo]. Yo no temo, precisamente por no tener temor es que estoy aquí sentada en mi escritorio. Seguiremos aquí. Vamos a seguir con la Constitución en la mano, defendiendo nuestros derechos», puntualizó.

La acción más reciente en contra de alguien del entorno de la fiscal fue la anulación ayer del pasaporte del director de Actuación Procesal del Ministerio Público, Zair Mundaraín, cuando viajaba a Argentina para la reunión de la Asociación Iberoamericana de Ministerios Públicos. No obstante, Ortega parece tener cartas bajo la manga y dio a conocer que pronto acusarán a funcionarios públicos vinculados a la corrupción de la constructora brasileña Odebrecht.

El Ministerio Público también avanzó esta semana en casos de corrupción en la estatal Petróleos de Venezuela y aspira a imputar a quienes estuvieron inmersos en casos de desfalco. Asimismo, imputó el lunes por presunta violación de derechos humanos al responsable de la seguridad de la Asamblea, Bladimir Lugo, a quien citó para hoy por su inacción ante el ataque al Parlamento.

Mientras, la oposición prepara para el domingo el «acto más grande de rebeldía» que se haya realizado en los últimos tiempos en Venezuela. Celebrará una consulta popular, sin apoyo del Consejo Nacional Electoral, con tres preguntas que buscan legitimar las acciones de protesta que vendrán en los próximos días. En respuesta, el chavismo llamó a un simulacro de movilización de su militancia a favor de la Constituyente y también el poder electoral anunció que en los centros electorales se realizarán simulacros para enseñar a la gente cómo votar. Ese día habrá tres sectores movilizados en un país que lleva 103 días de protestas opositoras.

Los venezolanos en el exterior también podrán participar en la consulta. Edinson Ferrer, secretario de organización de Primero Justicia, dio a conocer que en más de 70 países están organizados y que las ciudades del mundo que han pedido mayor cantidad de mesas y puntos de participación son Madrid y Miami. En Venezuela, atenderán a los ciudadanos en 2.029 puntos y cuentan con que los electores que dieron el triunfo a la oposición sean los que se manifiesten.